La visita del príncipe Harry a Reino Unido no ha durado más de lo estrictamente necesario. Un día después de inaugurar junto con su hermano, el príncipe Guillermo, la estatua en honor a Diana de Gales en el día que habría cumplido 60 años, el duque de Sussex ya vuela camino a Los Ángeles, en donde se va a reencontrar con Meghan Markle y sus dos hijos, Archie y Lilibet Diana.
Según ha publicado el diario Hello!, el nieto de Isabel II se fue al aeropuerto después de asistir al acto en honor a su madre para llegar lo antes posibles a Estados Unidos, en donde reside con el resto de su familia. Un gesto con el que el príncipe Harry ha dejado claro sus ganas de volver a Estados Unidos junto a su familia, algo comprensible, si se tiene en cuenta que su hija pequeña apenas tiene un mes de edad. Eso sí, el duque ha estado en Londres tan solo el tiempo necesario para cumplir la cuarentena obligatoria y estar presente en el homenaje.
Un regreso a Estados Unidos que imposibilita que los hermanos mantengan esa esperada conversación para dejar atrás todas sus diferencias. Contra todo pronóstico, los príncipes Guillermo y Harry se mostraron unidos durante el acto e incluso compartieron bromas. No obstante, según ha publicado el diario The Sun, tras el acto, los hijos del príncipe Carlos tan solo compartieron 20 minutos. Un tiempo en el que aprovecharon para tomarse una copa de champán, pero que parece insuficiente para esa reunión que tienen pendiente.
Desde que el príncipe Harry y Meghan Markle decidieron hablar en una sincera entrevista con Oprah Winfrey, la relación entre los hermanos ha sido más que complicado. Por ello, muchos eran los que apuntaban a que ambos mantendrían una reunión durante la visita del duque de Sussex al Reino Unido. Un encuentro que tendrá que esperar.