Este fin de semana la Casa Real española ha estado de lo más repartida. Cada uno de sus miembros ha hecho frente a diferentes cuestiones personales o institucionales que le han mantenido separados uno de otros. Sin embargo, el pasado domingo la reina Sofía (85 años) ha podido disfrutar de una comida junto a su hija, la infanta Cristina (58 años), y la compañía de su nieta, Irene Urdangarin (18 años).
A este plan familiar es muy probable que la reina Letizia (51 años) no se uniera, al menos sin la presencia de su marido el rey Felipe VI (56 años). De hecho, el monarca español se encontraba lejos de nuestras fronteras, ya que había viajado hasta El Salvador para asistir a la toma de posesión del presidente Nayib Bukele. No obstante, las relaciones familiares han dado un vuelco desde hace unos meses que se pudo ver un acercamiento entre ellos.
El plan familiar de la reina Sofía con la infanta Cristina e Irene Urdangarin
La infanta Cristina ha tenido un fin de semana de lo más ajetreado. Aunque también ha tenido tiempo de poder disfrutar de la compañía de algunos de sus familiares. El viernes pasado Pablo Urdangarin disputaba un encuentro de balonmano en Jaén. Tanto su madre como su novia, Joanna Zott, quisieron acudir a esta importante cita en terreno andaluz para poder apoyar al hijo de Iñaki Urdangarin.
De hecho, se quedaron a disfrutar del día siguiente, donde según confirman desde ‘El Mundo’ visitaron los baños árabes ubicados en el palacio de Villardompardo y la catedral para acabar comiendo en un restaurante de la zona. A su vuelta a Madrid la hermana de la infanta Elena (60 años) pudo acudir junto a su hija Irene para comer con la reina emérita, donde algunas fuentes confirman al citado medio que podrían estar acompañadas también por Pablo tras disputar su partido.
De hecho, Irene se encuentra muy unida a su abuela. En la actualidad está tomándose un año sabático tras haber realizado un voluntariado en Camboya, del que ya ha regresado. Los citados miembros de la familia real acudieron a un restaurante de cocina asiática, el Shushita Cabana. El local se encuentra en Aravaca, uno de los más recientes que la cadena ha abierto y que cuenta con un precio bastante asequible que ronda los 35 euros por persona.
El plan familiar al que no se uniría la reina Letizia
No es habitual poder ver a la madre de la princesa Leonor (18 años) en diferentes eventos fuera de la agenda oficial con su familia política. Las últimas veces que se les ha podido ver juntas ha coincidido con diferentes cumpleaños, lo cual ha servido para acercar posturas tras el distanciamiento que había surgido tras la toma de decisiones del padre de la infanta Sofía (17 años) con la implicación en temas fiscales del rey emérito Juan Carlos I (86 años).
Sin embargo, también hemos podido ver a prácticamente toda la familia real española en diversos actos, como por ejemplo el funeral de Constantino de Grecia que tuvo en Londres. Además, hubo diferentes gestos entre los distintos miembros que supusieron un avance en esta relación que antes parecía ser mucho más distante, también incluido en la estrategia que estaban llevando a cabo los monarcas españoles de hacer alarde de la unión familiar para hacer frente a diversas polémicas que salpicaron a la Casa Real española.
El cambio de relación de los Reyes con la familia real
Para este cambio en la relación de Felipe con sus hermanas hay que remontarse al cumpleaños de la heredera de la Corona española. Aquella fecha marcó un antes y un después sin duda, ya que se dejaron atrás todas las rencillas y todos estos pequeños enfados familiares por la decisión de haber permitido que el emérito trasladase su residencia a Abu Dabi y, de este modo, estuviera lejos de sus hijos y nietos.
Cuando la Princesa de Asturias alcanzó la mayoría de edad se celebró una gran fiesta de cumpleaños, en la que estuvieron presentes gran parte de la familia real. Pero, sin duda, en el mes de diciembre se produjo otro acontecimiento que consiguió dar un golpe sobre la mesa. La infanta Elena cumplía 60 años, una cifra redonda que merecía ser celebrada por todo lo alto y reuniendo a toda la familia que pudo estar en aquel día.
Allí acudieron los Reyes de España, donde llegaron con la mejor de sus sonrisas para disfrutar de una comida en la capital española. Además, también se reunieron con gran parte de los nietos de los eméritos, aunque las grandes ausentes fueron Leonor y Sofía por motivos más que evidentes, ya que la heredera se encontraba en su formación militar en Zaragoza y la pequeña estaba en Gales cursando sus estudios de bachillerato.