Este 2025 va a ser un año especialmente importante dentro de la Casa Real española. Para empezar, la infanta Sofía (17 años) cumplirá 18 años en unos meses, siendo la única que falta por ser mayor de edad y suponiendo un antes y un después en su vida. Este será un cumpleaños muy destacado en el que, lamentablemente, seguramente no tenga a su hermana, la princesa Leonor (19 años), a su lado. La heredera al trono ha estado formándose en la Escuela Naval Militar de Marín, en Pontevedra, durante los últimos meses, clases que forman parte de su formación militar y que ahora pondrá a prueba en uno de sus mayores retos cuando embarque en el buque escuela Juan Sebastián Elcano, al que se subirá el próximo 11 de enero para estar seis meses alejada de España surcando los mares. Antes de que esto suceda, la hija mayor de los reyes va a poder disfrutar de unos días en Cádiz, días en los que llevará a cabo la siguientes actividades.
Leonor y sus planes en Cádiz antes de su gran viaje
Tal y como hemos podido saber, la princesa está a punto de llegar a Cádiz, donde estará unos días junto al resto de guardiamarinas de su promoción antes de embarcarse en este crucero de instrucción que despedirán sus padres, los reyes Felipe VI (56 años) y Letizia (52 años). Antes de que esto ocurra, Leonor va a llevar a cabo una serie de actividades junto a sus compañeros de aventuras. Primero, el miércoles por la tarde tendrán una primera toma de contacto con este buque subiendo a bordo del mismo, algo que continuará el jueves. Además, tal y como aseguran desde ‘Vanitatis’, antes de partir hacia Canarias, su primera parada, la royal y sus compañeros participarán en un homenaje en el Panteón de Marinos Ilustres, un acto solemne con gran carga simbólica.
Más tarde, el viernes todos acudirán al Ayuntamiento de Cádiz, desde donde irán a la localidad de San Fernando, donde podrán ver de primera mano la Escuela de Suboficiales de la Armada. El sábado por la mañana, antes de marcharse en este buque durante meses, la princesa de Asturias y sus compañeros asistirán a la Iglesia de Santo Domingo de Cádiz antes de que dé comienzo el acto de despedida en el que los padres de la joven tendrán muchísimo protagonismo.
De esta manera, Leonor se adentrará en el mar en el XCVII crucero de instrucción del buque escuela de la Armada, que llevará a 76 guardiamarinas en su interior, entre ellos la princesa, terminando su recorrido el próximo 14 de julio en Ferrol tras recorrer hasta ocho países y seis ciudades españolas. Entre otros lugares, Leonor viajará hasta Brasil, Chile, Perú, Panamá o Colombia.
El viaje más importante en la vida de la princesa Leonor
Durante los meses que la joven princesa se encuentre dentro del bergantín-goleta va a poder conocer de cerca diferentes tradiciones marineras y vivir en primera persona lo que supone vivir en el mar, algo que ya experimentaron en su día su abuelo y su padre y con lo que ella consolidará su formación militar, tal y como explicaban en un comunicado la Casa Real. La participación de Leonor en este programa recalca la “importancia que la Corona otorga a la formación militar y al conocimiento de las instituciones del Estado”, fortaleciendo su compromiso con las Fuerzas Armadas.
Durante lo que dure este viaje Leonor compartirá un camarote femenino con capacidad para cuatro personas, siendo justo cuatro mujeres las que estarán en esta travesía. Este cuenta con literas y un baño común, siendo seguramente un reto para la joven, que también tendrá que acostumbrarse a los horarios de instrucción, las guardias y las distintas maniobras diarias, tareas con las que quieren reforzar la disciplina, el trabajo en equipo y la capacidad de adaptación.
La formación en alta mar de la princesa
Leonor tendrá unos meses muy duros y estrictos por delante, unos en los que la formación que va a recibir incluye astronomía, meteorología, navegación y operaciones marítimas, facilitándole conocimientos técnicos esenciales para todas. Además, las guardias que van a realizar los jóvenes serán de cuatro horas, pudiendo ser de día o de madrugada, algo que combinarán con exámenes y sesiones de estudio.
También pondrá a prueba su capacidad física con las maniobras de velas, una de las actividades más duras, y tendrá que llevar a cabo responsabilidades logísticas como baldear la cubierta, engalanar el barco en los puertos y recibir a las delegaciones diplomáticas en las escalas internacionales.