Como cada martes, Meghan Markle se ha sincerado una vez más en su podcast de Spotify, ‘Archetypes’. Un espacio que está sirviendo a la duquesa de Sussex para comentar detalles de su vida que hasta ahora eran desconocidos. En esta ocasión, la mujer del príncipe Harry se ha sentado a hablar con Sophie Trudeau, la mujer del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, con quien mantiene una relación de amistad después de que se conocieran durante la etapa en la que la exactriz residió en Canadá para grabar ‘Suits’.
Una conversación en la que ambas han hablado sobre la exposición pública que han vivido a lo largo de todos estos años. En este sentido, Meghan Markle ha confesado “la culpa que sentía al ser una madre y esposa expuesta al foco público”.
Durante la presentación de su invitada, Meghan Markle ha asegurado que Sophie “sabe lo que se siente al ser madre y compañera al mismo tiempo y estar expuesta”. Algo sobre lo que la propia Trudeau ha profundizado: “Hemos caído en esta trampa de que nosotras, como mujeres modernas, podemos hacer cualquier cosa. Y aunque suena como un mensaje liberador, no lo es. De hecho podría asegurar que es algo tóxico”. En su opinión, actualmente se está cayendo “en creencias equivocadas sobre quiénes deberíamos ser, unas personas perfeccionistas y con delirios de grandeza de que podemos hacerlo todo. Y no es así. Deberíamos salir por completo de esa locura”.
Unas palabras tras las que Meghan Markle ha afirmado que, en su opinión, la mejor madre y la mejor mujer que se puede ser “es la auténtica, la que está profundamente conectada con nuestro propio conocimiento”. De hecho, la duquesa de Sussex considera que el sentimiento de culpabilidad es algo que se va adquiriendo con los años, al igual que pasa en el caso del sentimiento de libertad.
"Cuando crecí, me di cuenta de que con frecuencia definimos la libertad como una manera de independizarse del mundo, pero en realidad es una manera de ser independiente en el mundo”, ha asegurado.
Meghan Markle incluso se ha animado a narrar cómo son las "caóticas mañanas" en su chalet de Montecito: "Siempre preparo el desayuno para los tres. Es algo muy importante para mí y me encanta hacerlo porque creo que es la mejor manera de comenzar el día. Después me toca echar de comer a los perros -acabamos de adoptar a un tercero- y luego llevamos a Archie al colegio... ¡Es una locura!”.