Mary Donaldson, de la resignación a su ultimátum a la corona danesa: todos los gestos de su perdón

Mary Donaldson, de la mano de Federico de Dinamarca, se convertirá en reina consorte el próximo 14 de enero. Estos dos últimos meses hemos visto sus gestos de perdón

Adrián López

Redactor digital de Lecturas

Actualizado a 5 de enero de 2024, 09:50

Cordon Press
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Hace unos días que la casa real danesa sorprendió a todos con un movimiento en su institución: la reina Margarita abdicará el próximo 14 de enero dando paso al reinado de su hijo Federico de Dinamarca (55 años) y Mary Donaldson (51 años). Sin duda un cambio totalmente inesperado pero muy estratégico (porque ahora solo se habla de la nueva coronación) que llega tan solo dos meses después del revuelo mediático que provocaron las fotografías del próximo rey danés junto a Genoveva Casanova (47 años) paseando por Madrid. Desde que se publicaran dichas instantáneas la vida de la pareja dio un gran giro: se distanciaron para huir de la tormenta, se dejaron ver juntos solo en los actos oficiales, pusieron tierra de por medio durante las navidades e incluso la australiana se atrevió a dar varias entrevistas en las que habló de salud mental e infidelidad. ¿Qué ha pasado para que la futura reina haya accedido a dar este paso cuando los rumores de ruptura resonaron tan fuertes? 

Lo cierto es que Mary Donaldson ha tenido un comportamiento muy variopinto a lo largo de los meses. Y es que ha pasado de la resignación a dar un ultimátum a la corona danesa para no separarse y finalmente ser la reina consorte. ¿Cómo ha conseguido perdonar todo lo que ha pasado? Analizamos uno a uno todos los gestos de su perdón a Federico de Dinamarca, el gran amigo especial de la que fuera mujer de Cayetano Martínez de Irujo. 

La resignación de Mary Donaldson 

Recién publicadas las fotografías exclusivas por la revista Lecturas, Mary sabía que todos los ojos iban a estar puestos en ella y por ello hizo gala de una elegancia y calma que no todos podrían mantener. Y es que ante todo, la princesa sabía que debía ser una buena anfitriona para sus invitados royals y no ceder a los nervios o la pena cuando los Reyes de España visitaron el Centro de Arquitectura de Dinamarca. Sin duda en la misma línea del comunicado que emitió la Casa Real en el que mantenían una equidistancia respecto a los hechos revelados. "Mantenemos una política desde hace años de no comentar ni confirmar cualquier detalle relacionado con asuntos privados. Además, nos gustaría enfatizar nuestro compromiso de respetar la privacidad de los miembros de la Familia Real, incluido el Príncipe Heredero", se podía leer en el texto. 

Según fueron pasando las semanas Mary, que se mantuvo en un segundo plano soportando el dolor de los rumores de infidelidad, fue poco a poco regresando a su perfil más público para intentar dejar atrás todo lo que se estaba diciendo sobre su matrimonio, pero lo que nadie esperaba es que la futura Reina se sincerara como nunca en varias entrevistas. Sin duda una manera muy digna de expresar sus sentimientos e intentar perdonar de una vez por todas a su marido. 

Mary Donaldson habla de salud mental e infidelidad 

A principios de diciembre Mary rompió su silencio por primera vez. La consorte, que no se había pronunciado sobre lo ocurrido, dio una entrevista a 'La naturaleza y nuestra mente' donde se sinceró sobre los problemas de salud mental, un tema que ella siempre ha llevado por bandera y que tomó mucho sentido en aquel momento: "Eso es lo que pasa con el dolor. Si no lo procesas puede convertirse en un duelo complicado que afecte a tu calidad de vida y a tu salud", dijo la princesa en plena tormenta mediática. "Todos necesitamos ayuda de vez en cuando. Pero es muy importante que no dejes que los demás te definan. Quién eres y cómo eres", explicó tajante a la periodista. "La pena es algo que llevamos con nosotros", expresó emocionada. "La curiosidad en la vida consiste en fracasar y seguir adelante. Pensamos demasiado en lo que piensan y sienten los demás. Ojalá pudiéramos desprendernos un poco de eso", añadió emocionada. Pero no solo eso, el formato reveló que la australiana "ha trabajado durante muchos años para combatir la depresión y centrarse en la salud mental", escribieron textualmente sin dar más información al respecto. Una información que hacía más cercana a Donaldson y con la que dejaba claro que había que dejar el dolor y el resentimiento atrás. 

Infidelidad o no, la verdad es que Federico y Mary regresaron a la vida pública en plena Navidad. Después de disfrutar de unos días de vacaciones entre Australia y Nueva Zelanda, la pareja volvieron a casa para celebrar la Nochebuena junto a la reina Margarita. De hecho, en ese momento protagonizaron una imagen de unidad familiar con la que pusieron punto y final a las especulaciones de mala relación entre ellos. De hecho, la prensa danesa rescató una entrevista en la que Donaldson hablaba alto y claro sobre lo que pensaba de la infidelidad. El mismo año de su boda, la mujer del próximo rey de Dinamarca dejó claro "nunca aceptaría dentro de un matrimonio". Para la australiana, "una relación se basa en la confianza. Y si se abusa de esa confianza, hay un abuso de confianza muy grave. "Es difícil recuperar la confianza cuando se ha roto por completo. La confianza es sagrada, es una obligación. Es necesaria para mantener la independencia, para poder funcionar en pareja". 

El ultimátum de Mary Donaldson 

En medio de toda esta espiral de sentimientos a los que se ha tenido que enfrentar Mary, Luis Pliego, director de la revista Lecturas, ha revelado cuál ha sido el detonante que llevó a Margarita a renunciar a su trono. "En realidad la abdicación es algo que la propia Mary pidió", desveló el periodista frente a los colaboradores de 'TardeAR'. Era justo entonces cuando descubría las palabras exactas pronunciadas por la princesa: "O somos reyes ahora o esto se acaba", habría dicho. Ante la incredulidad de sus compañeros, Luis repitió las palabras con una pequeña variación: "O somos reyes o me voy a Australia". Queriendo evitar más polémicas la princesa está dispuesta a perdonar pero no a cualquier coste. Donaldson ha sentido toda la tensión y atención que este escándalo ha generado sobre ella y se le recompensaba o se iba para siempre. 

 

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