El revuelo mediático que hay generado entorno a la Casa Real de Dinamarca no cesa, incluso en estas fechas tan especiales. Había mucha expectación sobre los distintos destinos navideños que Mary Donaldson (51 años) y su marido, el príncipe Federico de Dinamarca (55 años), iban a tener. Haciendo apología de la unión familiar en estos complicados momentos, el matrimonio hacía su aparición la pasada Nochebuena con unas imágenes con las que pretendían callar todos los rumores sobre su matrimonio.
Además, sorprendía mucho que en las fotografías captadas el matrimonio aparece con una amplia sonrisa, además de ir cogidos de la mano. De este modo, reafirmaban así que no hay ninguna crisis o, al menos, de cara a la galería, ya que ambos son conocedores de que cada movimiento y cada gesto suyo es mirado y analizado al milímetro tras la publicación de las fotografías del príncipe heredero con Genoveva Casanova (47 años) en Madrid.
El vestido de gasa de Mary Donaldson
El pasado 24 de diciembre pudimos ser testigos de la unión del matrimonio, ya que ambos acudieron a la tradicional ceremonia religiosa en la catedral de Aarhus, donde fueron fotografiados a la salida de la iglesia en una actitud que para nada denotaba cierta crisis entre ellos, sino más bien todo lo contrario. Además de sus ya comentados gestos, sorprendía el look elegido por Mary, ya que se trata de un vestido romántico con un fondo en burdeos que combina a la perfección con el estampado de diferentes colores.
Además, Mary ha aprovechado el frío del país nórdico para elegir un vestido con cuello halter que le cubra la mayor cantidad de posible de su cuello, ya que ha lucido sin bufanda ni ningún otro elemento para resguardarse de las bajas temperaturas. Pero la nuera de la reina Margarita no ha dejado nada al azar y es que lo ha combinado todo con unas botas altas en los mismos tonos que su vestido, las cuales tienen un tacón medio y que hacen que su look sea un triunfador en las mujeres de más de 50 años.
Pero esta combinación súper elegante ha ido un paso más y es que la princesa también llevaba a juego unos guantes de piel, aunque en la imagen solo lo lleva en una de sus manos. No obstante, su look se completa con un abrigo a la altura de las rodillas, dejando que se pueda apreciar el estampado de su vestido que llega a la altura de los tobillos. Sin duda, en los complementos también ha triunfado Mary escogiéndolo todo en los mismos tonos de colores para no desentonar.
El look más ejecutivo de Mary Donaldson
Si para Nochebuena la australiana decidía este sofisticado look, para el día de Navidad dio un giro radical, aunque igual de acertado. Para el servicio religioso del día 25 de diciembre, la mujer de Federico apostó por una combinación mucho más sobria a la par que ejecutiva. Mary portaba un traje de cuadros oscuros con un jersey de cuello alto debajo, nuevamente para poder hacer frente a las bajas temperaturas de Dinamarca.
La australiana nuevamente volvía a combinar su atuendo con unos complementos en los mismos tonos. En este caso, tanto las botas de tacón alto como los guantes eran del mismo color que su traje. Además, para el día de Navidad Mary decidió llevar sus gafas de vista, las cuales se han convertido en un accesorio muy habitual en ella y que muestra en la mayor parte de sus apariciones públicas, a diferencia de la noche anterior que no las llevaba.