Harry y Meghan celebran mañana un día muy especial. Este 19 de mayo se cumplen dos años desde que se celebró la boda del nieto de Isabel II y su mujer. Dos años que han dado para mucho y que por fin van a poder celebrar tal y como ellos quieren, en la más estricta intimidad. Porque si por algo está marcado este segundo aniversario de la pareja es por ser el primero que festejan tras el ‘Megxit’. Podrán dedicar el día entero a rememorar su enlace como ellos quieran junto a su hijo Archie en Los Ángeles, ya que no tendrán ningún compromiso en su agenda.
Además no se sentirán obligados publicar nada en redes sociales, aunque son capaces de sorprender a todos haciendo algún tipo de aparición tal y como hicieron en el cumpleaños de Archie con un vídeo benéfico. Es habitual que cuando un miembro de la familia real celebra alguna cuestión como esta, dé las gracias a sus seguidores a través de su Instagram, compartiendo algún recuerdo especial. El año pasado ellos lo hicieron al compartir un vídeo con fotos de aquel día, algunas de ellas inéditas. Un día que pese a que ellos ya no forman parte de la corona británica, formará parte del recuerdo de todos los Windsor para siempre porque fue un día histórico para la familia.
La boda del príncipe Harry y Meghan Markle se convirtió en uno de los acontecimientos más importantes de la familia en muchos años y así lo demuestran las cifras económicas. El enlace costó casi cuarenta millones de euros, la gran mayoría destinados a la seguridad del evento. Más de cuatro mil invitados, alrededor de cinco mil periodistas acreditados para cubrir el enlace y miles de británicos agolpados en las calles y pubs de Reino Unido para celebrar el emotivo momento son otros de los números que dejan patente el interés que generó la boda.
El 19 de mayo de 2018 fue un día que marcó un antes y un después para la pareja. Desde ese instante y poniendo su amor por delante, la duquesa de Sussex entró a formar parte de la familia real británica de forma oficial. Pero incluso el día del enlace se pudo ver cómo Meghan no se encontraba muy cómoda en este ambiente. Una de las fotos más llamativas de la jornada fue la que protagonizan Meghan y Harry al salir de la celebración, subirse en un coche y poner rumbo a su hogar. Fue el momento en el que ambos se mostraron mas relajados, cuando por fin se quedaron solos y dejaron a un lado el protocolo.