La gran prueba de fuego de la princesa Leonor minutos antes de zarpar en Elcano el sábado: todos sus compañeros lo hacen

La princesa Leonor (19 años) ya se encuentra en el buque escuela Juan Sebastián de Elcano. La embarcación zarpará el próximo sábado 11 de enero para llevar a cabo su 97 crucero de instrucción, algo para lo que los guardiamarinas lo están preparando todo. Tanto la princesa de Asturias como sus compañeros llegaron ayer a Cádiz y subieron a Elcano para comenzar su convivencia y ponerlo todo a punto para el periplo que les llevará a diferentes países. Un viaje que comenzará en tan solo dos días en una jornada de lo más especial en la que la heredera se enfrentará a un gran reto.

Antes de que el buque escuela Juan Sebastián de Elcano zarpe del puerto de Cádiz, los alumnos vivirán diferentes momentos. A primera hora de la mañana, la princesa Leonor y sus compañeros de aventura acudirán a la iglesia de Santo Domingo para asistir a la tradicional misa que cada año tiene lugar minutos antes a la salida de la embarcación. Después, los guardiamarinas se trasladará hasta el puerto gaditano portando La Galeona. A continuación, tendrá lugar el momento más especial para todos los que se marchan a este viaje tan intenso.

Si hay un momento que se repite cada año en el puerto de Cádiz, es la despedida de los alumnos de sus seres queridos. El momento previo a subir al buque escuela Juan Sebastián de Elcano resulta de lo más emotivo. Los guardiamarinas se despiden de sus padres, de sus parejas… Instantes que dejan besos, abrazos, lágrimas de desconsuelo… Así lo recordaban ayer miembros de la tripulación del buque en la visita que ofrecieron a la prensa y en la que lecturas.com tuvo oportunidad de estar, asegurando que año tras año, se dan estos momentos lacrimógenos. Pues bien, es aquí donde viene la gran prueba de fuego de la princesa Leonor.

El reto de la princesa Leonor antes de subir a Elcano

En su caso, quienes acudirán a despedirle serán sus padres. Los reyes Felipe y Letizia estarán el sábado en Cádiz para formar parte del momento más emotivo de todos. La princesa Leonor siempre cuenta con el apoyo de sus padres en los momentos especiales y esta vez no será menos. Pero al contrario de lo que sucederá con sus compañeros, lo más probable es que la princesa de Asturias tenga que contener parte de su emoción en la despedida.

Aunque en más de una ocasión se ha mostrado cómplice con sus padres en público, teniendo gestos de cariño con ellos y mostrándose relajada, resulta extraño pensar que en el caso de la princesa de Asturias las lágrimas y la efusividad hagan aparición. Si a algo está acostumbrada es a seguir a rajatabla el protocolo y a ser contenida a la hora de mostrar sus sentimientos. Por tanto, su gran reto será mantener la compostura dentro de lo posible mientras que sus compañeros de aventura se dejen llevar más por las emociones.

En cuanto al resto de planes de la princesa Leonor antes de partir hacia Canarias, el primer destino del buque escuela Juan Sebastián de Elcano, volverá a hacer aparición el próximo viernes. Los alumnos acudirán al ayuntamiento de Cádiz para asistir a la recepción oficial que hará el alcalde Bruno García. Además, estaría previsto que la princesa de Asturias participe en un homenaje en el Panteón de los Marinos Ilustres, en San Fernando. Sin embargo, se desconoce qué día y a qué hora tendrá lugar este evento en caso de llevarse a cabo.

Los planes de los reyes Felipe y Letizia mientras Leonor ya está en Cádiz

En cuanto a los Reyes, mientras ella ya está en Cádiz, ellos siguen hoy con su agenda. Los reyes Felipe y Letizia llevarán a cabo un acto de esos que nunca faltan en su calendario anual. Este jueves 9 de enero estarán en el Palacio Real para la recepción al Cuerpo Diplomático acreditado en España. Un evento en el que la reina Letizia siempre derrocha elegancia con un look largo, tal y como dicta el protocolo.

La que probablemente no estará el sábado junto a la princesa Leonor, será su hermana la infanta Sofía. La joven ya habría retomado sus estudios de bachillerato en Gales y de ahí que pueda convertirse en la gran ausente de un momento tan especial para la heredera.