¿Están jugando al despiste? Desde que Lecturas publicara las imágenes de Federico de Dinamarca (56 años) paseando por las calles de Madrid con Genoveva Casanova, el matrimonio de los nuevos reyes daneses ha estado en el punto de mira. Gestos de cariño y miradas cómplices que se esfumaron para dar paso a un claro malestar por parte de Mary Donaldson (51 años), apatía y desasosiego que se hacía evidente en cada una de sus apariciones públicas.
Aunque la Casa Real nunca dijo nada al respecto, la "desaparición" de la consorte cuando todo saltó por los aires dejaba entrever que las cosas no estaban bien entre ellos. Mary puso rumbo a Australia junto a sus hijos pequeños hasta que sus obligaciones como reina la llamaron de nuevo. Ya convertidos en reyes y decididos a hacer borrón y cuenta nueva, al menos de manera pública, la pareja se embarcaba en su primera gira internacional. Un periplo por Suecia y Noruega que nos ha dejado imágenes para el recuerdo y con las que el matrimonio real pretendía zanjar de una vez y por todas los rumores de distanciamiento. Hasta ahora...
El juego de Federico y Mary de Dinamarca
Este 20 de mayo estaba marcado en rojo en el calendario de la familia real danesa. Como cada año, Federico y Mary presiden junto a sus cuatro hijos la carrera benéfica 'Royal Run'. Sin embargo, la forma en la que han promocionado el acto ha generado un gran revuelo en Dinamarca.
Mientras que el rey aparecía en la localidad de Fredericia, el príncipe Christian lo hacía desde Brønderslev. Copenhague era la ciudad en la que se encontraban Isabella, Vincent y Josephine pero, ¿dónde está Mary? Tuvimos que esperar hasta bien entrada la tarde para ver a la reina en su faceta más natural y distendida. La australiana reaparecía en solitario desde su casa junto a sus dos perros Coco y Grace. "Mis amigos están decepcionados porque no pueden unirse a la carrera", se podía leer junto a la tierna estampa.
Este gesto confuso por parte de la casa real danesa llevó a pensar que Federico y Mary habían marcado distancia en un acto tan significativo para ellos como la 'Royal Run'. Sin embargo, unas horas más tarde el monarca reaparecía, ya desde casa, y respondía al mensaje de su mujer a través de Instagram. "Ya no es tan decepcionante... La familia está en casa", escribía junto a una nueva imagen en la que Federico posaba con las mascotas, pero ni rastro de su mujer. A su lado, sus dos hijos pequeños, Vincent y Josephine, recién llegados de la carrera.
Este extraño juego en el que Federico y Mary se intercambian mensajes de manera pública pero evitar posar juntos antes las cámaras no ha pasado desapercibido para nadie. Sea como fuere, lo cierto es que esta situación no hace más que alimentar los rumores de distanciamiento entre ellos. La única imagen que se tiene del matrimonio junto es del final de la carrera. Mary esperaba detrás de la valla junto a sus hijos cuando Federico se unió a ellos, momento en el que compartieron risas y confidencias cuando creían que no estaban siendo grabados.
"Ha sido una carrera dura para mí, pero ha estado bien. Ha sido más accidentada de lo que esperaba. Cuando es tan empinada y no estás en buena forma, para mí es más rápido caminar que correr. Pero la misión era disfrutarlo y lo hice", confesó Mary Donaldson con resignación a los medios allí congregados nada más terminar la carrera.
Federico y Mary han inculcado su pasión por el deporte y la naturaleza a sus cuatro hijos, de los que están muy orgullosos. De hecho, durante su encuentro por las calles de Copenhague se hizo evidente la buenísima relación que hay entre todos ellos.
Su reciente visita a Noruega empujó al rey Harald a dirigirse personalmente a Mary en medio de un discurso que no tardaba en hacerse viral. "Te impusiste una gran tarea cuando te enamoraste de este danés deportista. Llevaste a Dinamarca, al país y a su gente en lo más profundo de tu corazón. Y hoy lleváis veinte años casados... Es bonito que hoy celebréis vuestro aniversario de boda con todos nosotros", unas palabras cargadas de afecto en las que el monarca quiso resaltar el papel de la consorte en la corona danesa.