Si hace solo unos días la veíamos disfrutar de una jornada de tenis en el torneo de Wimbledon, esta vez ha sido el turno del polo, uno de los deportes más seguidos en Reino Unido. Kate Middleton (41 años) se ha convertido en la mejor animadora de su marido, quien participaba en un partido benéfico Guards Polo Club que recaudó fondos para varias organizaciones benéficas apoyadas por el matrimonio desde hace años.
Pero si por algo ha sido noticia el último encuentro entre Kate Middleton y Guillermo ha sido por la forma tímida en la que la princesa de Gales ha felicitado la victoria a su marido. El hijo de Carlos III fue el encargado de recoger el simbólico premio de manos de su mujer, un momento cargado de risas que cerraron con un discreto y cariñoso beso en la mejilla.
El momento no tardaba en hacerse viral y es que son contadas las veces en las que hemos visto a los príncipes de Gales intercambiarse gestos de cariño. De hecho, para rememorar el único beso en los labios nos tenemos que remontar al día de su boda en 2011. Pero, al parecer, esta prudencia se debe a una norma no escrita dentro del férreo protocolo de la Casa Real.
La familia real británica no puede mostrar cariño en público, así lo aseguran los medios británicos. Esto quiere decir que están completamente prohibidos los abrazos y besos entre ellos, una norma que también se extendería a los más pequeños. De ahí que sorprendiera que Guillermo le diera un beso a su padre el día de la Coronación en la Abadía de Westminster o también sea muy comentado cuando Kate Middleton es especialmente cariñosa con sus propios hijos.
Kate Middleton, la mejor animadora de Guillermo en el polo
Aunque su deporte favorito es el tenis, Kate no ha pedido detalle del partido de polo que protagonizaba su marido en Windsor. Momentos muy divertidos en los que la joven se ha convertido en la mejor animadora y es que no dudaba en vitorear a su chico y aplaudir su buen hacer en el campo.
Para la ocasión, Kate Middleton ha estrenado un vestido con el que reafirma su pasión por el azul en todas sus versiones. Esta vez se trata de una apuesta más veraniega, un diseño celeste con un favorecedor estampado floral en blanco, mangas abullonadas, cuello redondo y cintura ajustada, firmado por Beulah London y que todavía está disponible en la web de la marca por 640 euros. Aunque es tan versátil que combina con todo, incluso con zapatillas, la princesa recurría a su versión más sofisticada al llevarlo con unos elegantes salones destalonados en color nude.
Con esta aparición, Kate pone punto y final a sus compromisos oficiales esta semana. Sin embargo, es un misterio cuando darán comienzo a sus ansiadas vacaciones de verano, aunque todo parece indicar que será muy pronto ya que George, Charlotte y Louis dan por finalizado el curso en la escuela Lambrook este mismo viernes.