Pilar Eyre ha tirado de la manta en su blog semanal en Lecturas y ha abordado el tema de la boda de Juan Carlos y doña Sofía el 14 de mayo de 1962, un enlace que se empeñaron a hacer creer que era un cuento de hadas pero la realidad es que fue "un relato de terror": "Fue un despropósito desde el principio hasta el final", ha comentado la periodista en esta revista. Sin embargo, ha ido más allá y ha querido hacer una especial mención a los dos hombres que han marcado la vida de doña Sofía antes de pasar por el altar con el emérito.
Tal y como ha apuntado Pilar Eyre, Sofía y Juan Carlos "se casaron sin amarse y al final llegaron a detestarse", a diferencia de otros dos 'royal' europeos por los que sí experimentó grandes sentimientos: el duque de Kent y Harald de Noruega, dos historias de amor fallidas.
"Tampoco Sofía estaba enamorada de Juan Carlos, al contrario de lo que siempre se nos ha hecho creer. Enamorada había estado del duque de Kent, primo de la reina de Inglaterra. Y, cuando este se hizo novio de otra chica, su ambiciosa madre, la reina Federica, había intentado emparejarla con el príncipe Harald de Noruega. Precisamente en la boda del duque de Kent los habían sentado juntos y la prensa esperaba que después de la ceremonia se anunciara su compromiso", ha contado Pilar Eyre dando detalles de cómo nació la relación de Sofía con don Juan Carlos.
"Pero Sonia, una plebeya con la que Harald estaba saliendo, se presentó la víspera en el hotel Claridge’s contando a gritos que, si Harald se casaba con Sofía, ella se suicidaría allí mismo. El resultado fue que el noruego le dio plantón a la pobre princesa griega y cuando don Juan vio en la iglesia que el asiento de su lado estaba vacío, dio un empujón a su hijo para que se sentara y ahí empezó todo", ha concluido la periodista asegurando que esta unión fue un tanto forzada.