La reina Sofía (84 años) ha vuelto en solitario a Palma de Mallorca. La emérita demuestra una vez más por Semana Santa la conexión especial con la isla balear. Vínculo que no se repite con su nuera y sus nietas que, un año más, han optado por disfrutar de unas vacaciones privadas, sin que haya trascendido ni la duración ni el destino.
A pesar de la soledad de la esposa del rey Juan Carlos, se ha dado una inusitada coincidencia en Palma, y es que hasta allí han viajado por sorpresa y por separado Iñaki Urdangarin (55 años) con su novia, Ainhoa Armentia, y el rey Felipe (55 años).
Todos juntos, pero no revueltos, solo el padre de la princesa Leonor (17 años) se ha encontrado por sorpresa con su madre, quien este lunes vuelve al escenario 'maldito' de su encontronazo con Letizia (50 años).
La emérita ha presidido, en este Lunes Santo, el concierto anual de Pascua, en la catedral de Palma de Mallorca, en el que la Orquesta Sinfónica de Les Illes Balears, dirigida por Pablo Mielgo, y la Coral Universidad de les Illes Balears, formada por 90 cantantes y con Joan C como director, ha interpretado un Réquiem Alemán de Johannes Brahms. Todo lo recaudado en el concierto irá a beneficio de Projecte Home Balears, que colabora facilitando tratamientos a personas drogodependientes para que puedan vivir sin adicciones.
Doña Sofía ha optado por un sobrio total look negro, acompañado de medias y abrigo del mismo color. Un pañuelo satinado, de colores blanco y beige y con motivos florales aportaba el toque de color al conjunto.
Como toque final, en la solapa del abrigo podíamos ver un broche dorado en forma de flor.
3 de abril de 2018: el día D
Hace cinco años, el 3 de abril de 2018, tuvo lugar una de las escenas más sonadas de la monarquía española en la época contemporánea. La familia real había acudido a la Catedral de Palma para acudir a la misa del Domingo de Resurrección y, durante la salida, la reina emérita Sofía y la reina Letizia protagonizaron un encontronazo delante de las cámaras de decenas de medios de comunicación.
Sofía pretendía hacerse una foto con Leonor y la infanta Sofía (15 años) entre la multitud que se encontraba en la catedral. Sin embargo, Letizia tenía otros planes. La reina se interpuso entre los fotógrafos y su suegra y sus hijas, intentando impedir así que se tomará ninguna imagen. La emérita intento hacerse a un lado, pero la reina volvió a moverse. Ambas se dedicaron unas palabras y algunos gestos bruscos, mientras sus respectivos maridos observaban la escena, entre confusos y sorprendidos.
Desde este rifirafe la familia real solo asistió a la Misa de Pascua una vez más, en 2019, donde más de cincuenta medios de comunicación y muchos curiosos observaban la situación, esperando otra escena memorable. En 2020, el COVID-19 impidió la celebración de ningún acto litúrgico y en 2021 y 2022, el rey, la reina y sus hijas decidieron no presidir ese acto de manera pública.
Relación entre suegra y nuera
Desde aquel día, la relación entre reinas se volvió tensa, como poco. Disminuyeron las ocasiones en que se encontraban y, cuando sucedía, era evidente que ambas intentaban evitarse.
No fue hasta la operación del rey emérito Juan Carlos, cuando se las volvió a ver juntas. El rey, Letizia, Sofía, Leonor y Sofía bajaron del coche oficial y, en seguida, la emérita cogió de las manos a sus nietas mientras se acercaban a la puerta de la clínica.