Marius Borg ha querido responder. La policía noruega ha emitido un comunicado sobre el hijo de la princesa Mette-Marit a primera hora de este martes. Tras sus muchos escándalos, las denuncias y haber tenido que ingresar en una clínica de rehabilitación, ahora el hijo de la princesa ha sido detenido. Una nueva acusación pende sobre él: violación. Borg vuelve a estar en el ojo del huracán y puede terminar llevándose a la propia Corona por delante.
"La policía ha ampliado ahora el cargo contra Marius Borg Høiby. El cargo se ha ampliado para aplicarse también a una relación sobre la violación de una persona que está inconsciente o que por otras razones no puede hablar”, reza el comunicado emitido por la policía noruega y que recoge toda la prensa del país.
El hijo de la princesa está detenido de nuevo, desde el pasado lunes. Un nuevo cargo que se suma a los muchos que ya acumula. Marius Borg vuelve a estar privado de libertad después de que su madre acudiese a visitarle en la clínica de desintoxicación. Un nuevo quebradero de cabeza para la Corona noruega y llega en el peor momento.
Marius Borg, detenido de nuevo
Fue el pasado lunes cuando la policía arrestó a Marius Borg y procedió a su detención y traslado a prisión. El hijo de Mette-Marit, que pasaba por su tratamiento para curar sus adicciones, era interceptado después de que se presentase una denuncia contra él por violación. “Hemos registrado su casa y hemos confiscado cosas en el acto. Él (Marius) se encuentra actualmente detenido en Groenlandia, distrito de Oslo. Aún no se ha decidido si será presentado ante un juez en prisión preventiva. Anunciaremos esto más tarde”, apuntan desde ‘Seh og hor’, uno de los principales medios noruegos.
Es la tercera vez que Marius es detenido en los últimos meses. Todo comenzó cuando protagonizó una agresión verbal y física a la que era su pareja en un hotel. La policía le localizaba y detenía durante varias horas en comisaría. El escándalo era mayúsculo. Su madre, la princesa Mette-Marit, acudía a su llamada y le mantenía en su casa en un intento de calmar las aguas. No fue posible.
La pena a la que se enfrenta ahora con el nuevo cargo es de hasta 10 años de prisión. Borg se ha convertido en el miembro más conflictivo de la realeza europea. Aunque en sentido estricto no forme parte de la Familia Real ni tenga cargo alguno en la Corona, Borg es hijo de Mette-Marit y se ha criado junto al príncipe Haakon como uno más. Es, sin duda, el mayor obstáculo en el presente para un posible ascenso al trono.
La respuesta de Marius Borg
Según informa el portal 'VG', el hijo de Mette-Marit no ha reconocido los hechos de los que se le ha acusado. "Høiby no se declara culpable tras la ampliación de los cargos. Trabaja bien con la policía y quiere dar explicaciones", ha asegurado Øyvind Bratlien, abogado del joven. El hijo de la princesa pretende colaborar con la policía para esclarecer qué ha ocurrido pero se declara inocente de todo.
La detención se producía el pasado lunes y la víctima, al parecer, no forma parte del listado de las víctimas de los delitos anteriores. Según su letrada, esta está pasando un momento muy difícil. La denuncia llegaba cuando Borg se encontraba tratando de desintoxicarse de sus múltiples adicciones. Un nuevo escándalo que le ha llevado a prisión.
Escándalo tras escándalo
“Violencia, cocaína, el mundo criminal y ahora la violación”. El historia de Marius Borg comienza a ser más que complicado. El hijo de la princesa Mette-Marit comenzaba su periplo criminal el pasado mes de agosto, cuando era detenido por agredir verbal y físicamente a la que era su pareja. Desde entonces, ha ido encadenando conflictos, condenas y escándalos.
Lejos de permanecer aislado y ajeno a todo, Borg no ha dudado en ir apareciendo a través de fotografías. En algunas de ellas se le podía ver burlándose de las portadas de la prensa noruega donde se recogían sus escándalos. El hijo de la princesa no tiene límite. A pesar de emitir un primer comunicado indicando que iba a poner freno a sus adicciones y excesos, no parece que esto haya sido así.
El hijo de la princesa heredera ingresaba en un centro de desintoxicación pero ni así terminaba la polémica. Los focos se dirigían, entonces, a la propia Mette-Marit por su conocimiento de las actividades de su hijo y la permisividad que había tenido con él. También por haber estado en contacto con las víctimas y haber intercedido para frenar las posibles consecuencias.
Un terremoto que tiene a la monarquía noruega en vilo y que podría terminar pasando mucha factura a la Corona. Por el momento, ni hay previsión de que el príncipe Haakon pueda sustituir a su padre, Harald, ya de avanzada a edad.
Contactos con el mundo criminal
“Marius Borg Høiby tiene conexiones con personas con antecedentes criminales graves, incluidas conexiones con el entorno de las pandillas y los Hells Angels”, publicaban los medios noruegos hace escasas semanas. “Borg Høiby conoce a personas que forman parte de una gran red internacional de blanqueo de dinero y que han traficado con cocaína y esteroides anabólicos”.
Las compañías que rodean al hijo de la princesa Mette-Marit no son nada recomendables. Borg no solo ha provocado escándalos por su cuenta, sino que ha terminado implicando a su madre y el marido de esta. También salió a la luz que el hijo de la princesa logró colarse en las dependencias de los herederos, prohibiéndosele el acceso posteriormente. Ahora, de nuevo en prisión, la cuerda se tensa de nuevo. ¿Qué harán Mette-Marit y Haakon ante este grave hecho?
La situación de la princesa Mette-Marit no es fácil. Mientras que Haakon se ha mostrado firme al respecto, asegurando que ante acontecimientos tan graves no se podía mirar a otro lado, la princesa permanece al lado de su hijo. Ha ido a visitarle, el apoya e incluso le abrió las puertas de su casa tras la primera detención. Un delicado equilibrio entre la parte de madre y la de heredera al trono. Sobre todo cuando, poco a poco, el escándalo va siendo mayor.