Estamos ante uno de los momentos más delicados en muchos años para la Familia Real Británica. Tras el anuncio del cáncer del rey Carlos III (75 años) y de Kate Middleton (42 años), que también anunció esta enfermedad en un emotivo y viral vídeo, tenemos a la reina Camila (75 años) y al príncipe Guillermo (41 años) asumiendo las funciones del rey como pueden, todo mientras cuidan de sus parejas. En mitad de todo este drama, hay alguien en el punto de mira, el príncipe Harry (39 años), alejado hace tiempo de su familia para irse a vivir con su mujer, Meghan Markle (42 años) a Estados Unidos. Este podría estar a punto de volver a visitar Londres, pero para ello parece tener una condición.
La condición de Harry para volver a Reino Unido
Se espera que el duque de Sussex asista a un servicio especial en la Catedral de San Pablo el próximo 8 de mayo, fecha que marcaría el décimo aniversario de los Invictus Games, juegos que creó el mismo con ayuda de la fallecida reina Isabel II. Estos juegos, inaugurados en Londres en 2014, son para hombres y mujeres militares enfermos y heridos y Meghan Markle ha sido una gran defensora de los mismos. De hecho, hace poco pudimos verla acompañando a Harry a Canadá para promover los Juegos de 2025, que se llevarán a cabo en Vancouver y Whistler.
Sin embargo, aunque se espera que Harry asista al evento del mes que viene en Londres, todavía queda la duda de si le acompañarán su mujer y sus hijos, teniendo una clara condición para que esto suceda, según informa ‘The Telegraph’. Este medio afirma que, a menos que Harry consiga revocar la decisión del Ministerio del Interior de no tener derecho inmediato a protección policial cuando esté en Reino Unido, seguramente no vayan junto a él en este viaje Meghan y sus dos hijos, Archie y Lilibet.
Harry quiere tomar medidas legales
Recordemos que en febrero de 2020 el Comité Ejecutivo para la Protección de la Realeza y las Figuras Públicas (Ravec) decidió que este ya no recibiría protección cuando esté en el país financiada por fondos públicos al haber decidido alejarse de su familia y vivir una vida de plebeyo fuera de la realeza, algo con lo que Harry no estaría de acuerdo, habiendo emprendido acciones legales ante esta decisión. Los abogados de Harry han afirmado previamente al tribunal que este ha sido "señalado" y tratado de manera "menos favorable" con la decisión de cambiar el nivel de su seguridad personal financiada por los ciudadanos.
Consideran esta decisión como "ilegal e injusta", aseverando que Harry cree que sus hijos, Archie y Lilibet, no pueden "sentirse como en casa" en el Reino Unido si "no es posible mantenerlos a salvo" allí. De hecho, en una declaración escrita del propio Harry, este afirma tener una “gran tristeza” al haberse visto obligado a abandonar el país en 2020, ya que “el Reino Unido es mi hogar”.
"El Reino Unido es fundamental para la herencia de mis hijos y es un lugar en el que quiero que se sientan como en casa, tanto como el lugar donde viven en este momento en los Estados Unidos. Eso no puede suceder si no es posible mantenerlos seguros cuando estén en suelo británico. No puedo poner a mi esposa en peligro de esa manera y, dadas mis experiencias en la vida, soy reacio a ponerme en peligro innecesariamente también", expresaba el joven. En un fallo emitido en febrero, el juez del Tribunal Superior, Sir Peter Lane, rechazó el argumento del duque y concluyó que el enfoque de Ravec no era irracional ni injusto, decisión que Harry ha anunciado que pretende apelar.