El pasado miércoles conocíamos que Kate Middleton (42 años) tenía que ser ingresada para someterse a una delicada operación. Se trataba de una cirugía abdominal planificada y, tras salir de quirófano, pudimos conocer que la Princesa de Gales deberá permanecer en el hospital cerca de dos semanas, no pudiendo retomar sus funciones públicas hasta que no haya pasado la Semana Santa, según informaba la Casa Real a través de un comunicado oficial. Esto ha creado un gran revuelo entre los ciudadanos británicos, que todavía intentan recuperarse del fallecimiento de Isabel II. Ahora, según acabamos de conocer, algo podría haber salido mal en el postoperatorio, siendo más preocupante de lo que pensábamos la salud de Kate.
Kate Middleton y su preocupante estado de salud
Según aseguraba Concha Calleja en el programa ‘Fiesta’, de Telecinco, la princesa podría haber ingresado en el hospital ya el pasado diciembre, justo antes de acabar el año. "He hablado con un asistente de la Casa Real de forma extraoficial y me aseguran que algo ha salido mal en el postoperatorio. La situación en general era tan grave como para que todo el mundo supiese que algo andaba mal, y ese ha sido el motivo por el que la Casa Real han decidido mandar esos dos comunicados”, explicaba Calleja. “(...) La última vez que la vimos fue en la comida de Navidad y a partir de ahí comienza a sentirse mal, no era la primera vez que se sentía mal pero si la más preocupante. Kate ingresa en el hospital el 28 de diciembre y está varios días en manos de los médicos".
La periodista afirmaba que "el comunicado informando sobre Kate Middleton ha sido tan ambiguo que no nos dice nada prácticamente, sólo nos asusta". Además, Calleja ha confirmado que, a pesar de que la Casa Real Británica está siendo muy ambigua en sus comunicados oficiales, todos estarían muy preocupados por el estado de Kate: "Yo creo que el Palacio dará un nuevo comunicado en los próximos días explicando mejor lo que ocurre”. Además, Concha asegura saber de qué ha sido operada Kate, afirmando que “la operación era grave en sí misma, el hospital elegido es un hospital privado, no es al que acostumbran a ir ellos”.
No fue una operación de cirugía estética
La periodista también ha querido dejar claro que no se ha tratado de una operación de cirugía estética, algo a lo que apuntaban diferentes medios del país, siendo una operación por “enfermedad, algo urgente, de varias horas y con cierto riesgo, un riesgo que no ha ocurrido en la camilla pero sí en el postoperatorio, cuando han habido complicaciones", explica. La intervención, planificada con antelación, tuvo lugar en The London Clinic en Marylebone, según informó el Daily Mail, lugar donde ahora reposa la Princesa.
Carlos III también ingresado
Tal y como supimos, gracias a un comunicado emitido en el Kensington Palace, Kate no es la única con problemas de salud de la familia real, ya que su suegro, el rey Carlos III, también ha tenido que ser ingresado. "Al igual que miles de hombres cada año, el Rey sufre agrandamiento de la próstata. La dolencia de Su Majestad es benigna y acudirá al hospital la próxima semana para un procedimiento correctivo. Los compromisos públicos del Rey se pospondrán durante un breve periodo de recuperación".
De esta manera, la Casa Real Británica acaba de quedarse sin dos de sus máximos representantes durante un tiempo, ya que ambos estarían recuperándose. Hasta aquí todo bien pero, la duda que asalta a todo el mundo es por qué han sido tan específicos en el comunicado sobre el estado de salud del rey y tan recatados a la hora de hablar sobre lo ocurrido a la mujer del Príncipe Guillermo.