La muerte de Bernardo Pantoja a los 69 años en noviembre de 2022 puso en primera línea de actualidad a Junco, su mujer. Esta bailaora japonesa cuyo nombre real es todo un misterio vivió por y para el padre de Anabel Pantoja hasta su muerte, inseparables desde el día que se conocieron. Muy discreta, tranquila y siempre en un segundo plano pese a las polémicas familiares que rodearon a Bernardo, Junco no se separó de su lado en los momentos más difíciles, convirtiéndose así en su confidente y compañera de vida. Ahora, la japonesa vuelve a estar en el punto de mira y es que, tras la decisión de Isabel Pantoja de saldar todas sus deudas con la venta de propiedades, su hogar está en peligro.
Junco continúa viviendo en la que fue su casa junto a Bernardo Pantoja en Sevilla, una casa que reformó para la comodidad del padre de Anabel Pantoja. No obstante, tras conocerse que Isabel Pantoja ha vendido propiedades para saldar sus contundentes deudas, Junco podría ser la siguiente en tener que desalojar el piso en el que vive, que es propiedad de la tonadillera y en el que Bernardo vivió hasta su fallecimiento hace poco más de un año.
Este ha sido el hogar de Junco pero ahora ve como su vida se tambalea, así lo han contado estos días en 'TardeAR': "Lo está pasando fatal, un sufrimiento muy grande. La abogada le ha aconsejado y pedido que no se marche de esta casa". Isabel Pantoja tiene un importante escollo para vender ese piso y es que primero Junco, viuda de Bernardo, tiene que abandonar el domicilio y su abogada le habría recomendado, según esta información del programa de Ana Rosa Quintana en Telecinco, que no lo haga.
Durante años se pudo ver a Junco acompañando a Bernardo en sus visitas al médico. Además de todos sus cuidados, esta contribuyó a la economía familiar gracias a sus ingresos como diseñadora y costurera de trajes flamencos que exporta a su país de origen. Junco no tiene ningún contacto con Anabel Pantoja, al menos que se sepa, a pesar de que esta es la única hija de su difunto marido con el que compartió tantos años volcándose en cuerpo y alma.
Ahogada por el dinero que debe a la Hacienda pública, Pantoja ha vendido su ático de Fuengirola y ahora podría desprenderse de otras propiedades, de ahí que Junco esté en el punto de mira más que nunca.
La historia de amor de Junco y Bernardo Pantoja, el padre de Anabel
De su historia de amor poco se sabe al margen de que se conocieron en El Rocío y desde ese momento se convirtieron en inseparables. Su círculo de amigos más íntimos siempre ha asegurado que la japonesa sentía y amor incondicional hacia Bernardo. En 2017 al andaluz le amputaron una pierna y solo un año después, ambos oficializaron su relación con una boda secreta en Sevilla a la que no asistió ni Anabel ni Isabel Pantoja.
Las informaciones en torno a la relación de Junco con la familia Pantoja ha sido contradictoria. La muerte de Bernardo la sumió en una delicada situación. El padre de Anabel residía junto a su mujer en una casa que es propiedad de Isabel Pantoja por lo que la japonesa tendrá que abandonar el que ha sido su domicilio en el centro de Sevilla en algún momento y comenzar una nueva etapa lejos de los Pantoja.
Su relación con Anabel Pantoja
La mala salud de Bernardo en sus últimos años llevó a Junco a pasar mucho tiempo con Anabel. Son muchas las veces que se ha hablado de la mala relación que existía entre ellas y cansada de especulaciones fue la influencer quien se apresuró a aclarar qué pensaba de la mujer de su padre. "Me encanta para él. Ahora hablo todos los días con Junco. No entiendo de donde sale que no me llevo bien con ella o que ella no se lleva bien conmigo. Está día a día con mi padre. Solo puedo agradecerle eso", declaraba hace unos años. Ahora, es toda una incógnita si ambas han mantenido en este año algún tipo de contacto o están más distanciadas que nunca.