La primera semifinal de 'La Voz Kids' nos ha dejado un sabor amargo ya que hemos podido ver la imagen más frágil de Antonio Orozco. El coach no ha podido aguantar la emoción cuando Sara, de quince años y de Pamplona, subía al escenario para cantar el tema 'Te dejé marchar' de Luz Casal. Una canción que a Antonio le tocó la fibra sensible al recordar a Susana, la madre de su hijo, quien falleció debido a una larga enfermedad el año pasado. Un duro golpe que ha marcado para siempre al cantante.
Cuando la joven concursante comenzaba a cantar, Antonio no podía contener la emoción y se tapaba la cara. Sin embargo, al final cedió a sus sentimientos y comenzó a llorar. Rosario Flores, que estaba a su lado, no paraba de mirarlo con los ojos vidriosos. Sabía perfectamente que el cantante estaba pensando en Susana. Tras la actuación, y con la pequeña también muy emocionada, Jesús Vázquez corría a darle un abrazo a Antonio, consciente del mal rato que estaba pasando.
Sabiendo que Orozco aún no estaba en condiciones de poder hablar, Rosario tomaba la palabra: "Lo has hecho muy bien, mi vida. Porque la música es lo más bonito que tenemos los seres humanos para llorar, para gritar, para reír... y cuando hay artistas como tú que cantas con esa sensibilidad tan bonito pues nos haces llorar y eso es lo más bonito de la música".
"¿Estás para hablar?", le decía Jesús a Antonio. "Yo te voy a decir una frase (refiriéndose a la actuación de la joven) que escribió Alejandro Sanz hace un tiempo y dice 'una lágrima es el prisionero que se escapa de la cárcel del alma'. En realidad, no hay nada que se pueda decir, ni ninguna palabra que pueda igualar a estas lágrimas. Así que solo te puedo dar las gracias desde la emoción. Y lo siento, son momentos difíciles para mí y sé que hay mucha gente que, como yo, sabe que hay veces que tenemos que tener mucho cuidado de cuidar lo más sencillo, lo más fácil, lo que tenemos más cerca. Que hay que tener mucho cuidado de dejar marchar según qué tipo de cosas y personas".