Aída Nízar se ha convertido en un auténtico fenómeno televisivo en Italia. La vallisoletana ha dejado una huella imborrable en tiempo récord, pues su fichaje por el 'Grande Fratello' (el 'Gran Hermano' del país de la bota) ha sido visto y no visto. Después de sufrir una agresión física durante su encierro y de protagonizar fuertes discusiones con la que se ha convertido en su enemiga pública número uno, la drag queen Baye Dame, Nízar recibía una nominación disciplinaria que significaba su 'muerte' en el programa. Una semana después de su debut en el reality era expulsada con el 51% de los votos de la audiencia en contra.
No cabe duda de que la concursante de realities es capaz de generar situaciones idénticas tanto en nuestro país como en otros donde prueba suerte, pues ha conseguido dividir al público italiano tanto como al español. Y es que con Aída solo hay dos opciones: amarla y odiarla. Precisamente, después de lo descolocadísimos que dejó a los espectadores de 'Grande Fratello' con su idiosincrasia excesiva, las redes sociales se han volcado con ella. Italia adora a Aída tanto como ella misma adora su vida.
Viendo el filón que es mantener en pantalla una mujer con tanta personalidad como ella, Barbara D'Urso, presentadora del concurso y estrella de la televisión italiana, la ha aceptado bajo su abrigo y protección ofreciéndole la oportunidad de convertirse en la colaboradora de algunos de los formatos que presenta, como 'Pomeriggio Cinque' y 'Domenica Live'. Precisamente en este último espacio televisivo apareció por primera vez Aída, dejando a cuadros en una principio a su audiencia, pero después ganándose su corazoncito.
Cada nuevo capítulo de la aventura italiana de Aída Nízar es más sorprendente que el último, y no nos extrañaría que continúe esta progresión pues, si algo sabe hacer bien la concursante de realities es 'liarla'.