La vida de Raquel Sánchez Silva más allá de la televisión: feliz mamá de mellizos y enamorada del productor Matías Dumont

Raquel Sánchez Silva (51 años) es un rostro habitual de la pequeña pantalla. Su andadura profesional comenzó en 1995 en la cadena de televisión local placentina 'TelePlasencia'. Desde entonces, no ha parado de encadenar un proyecto tras otro. Ha presentado espacios de todo tipo, desde Informativos hasta formatos tan diferentes como 'Maestros de la Costura', 'El Conquistador', 'Oído cocina', 'Pekín Express' o ‘Supervivientes’, por citar algunos. Se atreve con todo. No solo como presentadora, también como concursante.

Demostró sus dotes culinarias en ‘MasterChef Celebrity’ y participó en el exigente ‘El Desafío’ de Antena 3. Hace apenas unos meses tuvo la oportunidad de saldar una cuenta pendiente que le quedaba con el concurso. Demostró su puntería con el arco a ciegas. Cada viernes, emociona al público metiéndose en la piel de artistas de renombre en 'Tu cara me suena'. Lo hace junto a David Bustamante, Juanra Bonet o Julia Medina. Ponerse delante de un micrófono para cantar no es lo suyo. Algo más difícil es si le sumamos que tiene que hacerlo mientras baila a la vez. Sin embargo, no hay nada que se le resista. De hecho, este viernes le tocó ponerse en la piel de Gala Rizzatto para entonar 'Freed from Desire'. 

Raquel Sánchez Silva se licenció en Periodismo en la Universidad de Salamanca, pero empezó a trabajar reportera de deportes en la televisión de su Plasencia natal. De esto ha llovido mucho. Se ha convertido en un referente televisivo para muchos. Asegura que sufre por los concursantes, algo normal ya que sabe de primera mano lo que es competir ante las cámaras. Pese a esto, presentar cualquier formato es, sin duda, su lugar de confort. Su rol televisivo lo compagina con otro aún más importante para ella: el de ser madre. Tiene dos hijos, los mellizos Bruno y Mateo. Son fruto de su relación con el productor de cine y televisión argentino Matías Dumont. Nacieron el 21 de septiembre de 2015.

Son una parte fundamental de su vida, pero no suele hablar de ellos por pudor. Lo ha confesado en alguna que otra entrevista. Sí que se ha referido a ellos en su libro 'Dos mundos. Cuentos de mellizos, gemelos y otros hermanos sin igual’, que está basado en su propia experiencia como madre.

En sus páginas "están las emociones de mis niños de carne y hueso" y habla de que "ser mellizo no es fácil" por el hecho de que están destinados a "compartir amor". Fueron su inspiración para esta recopilación de cuentos en la que refleja las lecciones aprendidas "al escucharles llorar, al comprender sus celos, su soledad, su deseo de unicidad, su búsqueda de una identidad potente y distintiva, su amor y su vínculo extraordinario".

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Raquel Sánchez Silva y su tranquila vida junto a Matías Dumont

Comparte la gran responsabilidad de criarlos junto al argentino Matías Dumont. En 2013, justo tres meses después de la muerte de su primer marido, Mario Biondo, la presentadora de televisión decidía embarcarse en un nuevo proyecto profesional, ‘La incubadora’, un programa de Cuatro producido por Risto Mejide que buscaba jóvenes emprendedores. Era su regreso a la televisión tras difíciles meses. Fue en ese formato donde conoció al padre de sus dos hijos. Él ejercía como productor y las chispas saltaron nada más verse, aunque fue el productor quien dio el primer paso para intentar conquistarla.

El argentino consiguió devolver la alegría a la vida de la presentadora de televisión después del trágico suceso. "La mejor decisión que he tomado en mi vida ha sido tirarle los trastos a mi chica, madre de mis hijos", decía Matías Dumont en una de las contadas declaraciones públicas que ha hecho a lo largo de su relación con la presentadora. Llevan una vida de lo más discreta y normal en su casa del centro de Madrid. Un hogar "acogedor y cálido", como así lo definió Raquel Sánchez Silva a través de sus redes sociales, en el que ven crecer a sus pequeños de ocho años.

Se trata de un amplio piso de unos 180 metros cuadrados compuesto por techos altos y suelos de roble en espiga. Con tres habitaciones, un salón de grandes dimensiones con chimenea y una amplia cocina con isla, como así ha mostrado la presentadora de televisión. Decorado con sencillez y algún que otro mueble vintage, el hogar es el remanso en el que se relaja Raquel Sánchez Silva después de su jornada laboral.