'Ni que fúeramos', el antiguo 'Sálvame', ha vivido un tenso encuentro con Íñigo Nieva (34 años) en su restaurante. El marqués de Griñón ha inaugurado hace unas semanas su nuevo negocio: Casa Salesas, un establecimiento en pleno centro de Madrid que no ha comenzado con muy bien pie. Tras descubrir que las primeras reseñas las había puesto el propio marido de Tamara Falcó y su familia, el programa del canal Quickie ha destapado el problema que el local tiene con los vecinos. Pero no solo eso, uno de sus colaboradores ha estado comiendo este mismo jueves 23 y no se ha sentido muy bien tratado.
¿Quién ha vivido en sus propias carnes este momento tan tenso? Víctor Sandoval (57 años), acompañado de su vecina, ha acudido a probar alguno de los platos de la carta para saber qué tal se comía en el recién inaugurado restaurante. Y aunque los platos no le han parecido mal (solo se ha quejado de que el pan estaba tan duro como una piedra), lo cierto es que el colaborador ha vivido un encuentro con Íñigo en el que se ha sentido vilipendiado.
El comunicador ha explicado que cuando estaban en el restaurante se han encontrado al marido de Tamara en la puerta (aunque se ha ido rápidamente a la parte baja del local, que es la zona de copas), preciso momento en el que le ha ido a saludar. "'¡Hola, Íñigo!', le he dicho cuando me ha mirado como si fuera un apestado del siglo XIII. Me ha dicho 'hola'", ha explicado Víctor, dejando claro que no ha sido solo una percepción suya.
"Es una realidad. Aquí tengo a Nieves, que es mi vecina, que ha venido conmigo y me ha dicho que 'nos ha despreciado'. No creo que tenga mal día, creo que tiene esa cara siempre. Yo solo quería juzgar su trato como relaciones públicas porque él no es socio. Onieva que se busque otro trabajo porque lo suyo no es estar de cara a la gente. No tienes tacto. Nada que ver con el resto, que era de nivel", ha explicado el colaborador muy indignado.
Sandoval ha revelado que en Casa Salesas había mucha gente "de nivel", por lo que cree que Onieva lo único que hace allí es "desentonar". Pero después de que María Patiño y Kiko Matamoros pusieran en duda su versión, Víctor se ha apoyado en su acompañante para que apoyara su versión. "Nos ha mirado mal", ha contestado de nuevo. "Yo como cliente no me he quedado a gusto. No vuelvo, no quiero que me vuelvan a despreciar", ha añadido.
"La alcachofa no está mal pero el pan es un chusco que ni después de la guerra", ha comenzado diciendo la acompañante de Víctor, quien seguidamente ha explicado que tras quejarse les han llevado ya unas rebanadas más blanditas. "Que se les había pasado en el horno.. Vamos que te encasquetan el duro y si no te quejas te lo comes", ha continuado diciendo enfadado.
Tras sus feroces críticas, Víctor ha ensalzado el trato de los trabajadores del local y ha asegurado que por unos 50 euros por persona se come bien. "No es una carta de un gran restaurante, es como de picoteo tradicional pero de gente bien. La comida está en precio para el local que es. No es barato pero el sitio es genial y el servicio es muy bueno. Todo el servicio menos Onieva", ha explicado. Eso sí, a pesar de su mala experiencia con el marqués de Griñón, Sandoval ha puesto 5 estrellas en la reseña.
Iñigo, problema con los vecinos
Desde el programa de Belén Esteban y el resto de excolaboradores de 'Sálvame' también han desvelado una queja que tienen los vecinos con la apertura del restaurante. Y es que la acogida no parece que haya sido como esperaban por la gestión de la basura.
Casa Salesas, local propiedad de 'El turronero' e Iván Espinosa de los Monteros y gestionado bajo la empresa Casablanca Hospitality, tiene bien contentos a los residentes aledaños por la gran cantidad de bolsas que quedan a pie de calle. Un incidente que denunció 'Ni que fuéramos' que parece no haberse vuelvo a repetir.