Se estrena hoy: una serie estilo Bridgerton, pero en España y de la mano de los creadores de La Favorita y La Promesa.

Si estás enganchada a La Promesa en TVE y el estreno de La Favorita en Telecinco te ha dejado con ganas de más, toma nota, que Netflix promete subir las apuestas con una nueva creación de la productora que está tras estos dos exitazos de la televisión: Bambú Producciones.

Esta nueva serie, creada y escrita por Gema R. Neire (junto a otro gran equipo de guionistas y productores) promete estar al nivel de grandes éxitos de la gran N, como Los Bridgerton, con la que comparte algunos puntos en común. Aunque la propia Neire nos advierte que lo que vamos a ver en pantalla dista mucho de la serie de época británica. Su visión es de un romance más gamberro, una comedia que sin duda va a dar de qué hablar.

Como Los Bridgerton, pero en España

Es imposible no hacer comparaciones. Una serie de época, centrada en los cortejos y los romances que se cocían a fuego lento, con tonos pastel, vestuario de escándalo y una banda sonora contemporánea. Al ver el tráiler de Manual para señoritas no podemos evitar pensar en Los Bridgerton. La propia Neire, creadora de esta serie, asegura que comprende las comparaciones.

“Hace muchos años nos molestaba mucho que nos comparasen con cualquier cosa. Yo estos años he aprendido que buscar una referencia no tiene nada malo y sobre todo cuando la referencia es algo de tanto éxito”, comentaba recientemente en una entrevista para Europa Press. Sin embargo, la creadora asegura que lo que vamos a encontrarnos en pantalla es muy diferente a lo que hemos visto antes.

Para empezar, su serie es una comedia, y, por tanto, “es más gamberra”. Además, han apostado por intentar romper ese “manual” de las series de época romántica, renegando de corsés, presentando protagonistas que desafían los roles de género y poniendo en práctica estrategias tan actuales como romper la cuarta pared.

¿Dé que va Manual para señoritas?

Manual para señoritas nos lleva directamente a 1880, en España. Elena Bianda (Nadia de Santiago) es la dama de compañía más solicitada de toda la ciudad. Es joven, pero ya ha sido la encargada de garantizar decentes cortejos a más de 20 damas que, bajo su tutela, han conseguido felices desenlaces. “Me encantan las historias de amor, sobre todo las que tienen un final feliz”, esa es la primera frase que oímos de la boca de este personaje que se enfrenta a un desafío peculiar al aceptar el encargado de casar bien a las tres hermanas Mencías.

Allí conoce al coprotagonista, Santiago (Álvaro Mel), un hombre de buena familia que pretende a la mayor de las hermanas. El problema es que es, como ella lo define, “el error más guapo del mundo”. Y no se puede permitir cometerlos. Se conforma así un triángulo amoroso, con tintes de romance prohibido y mucho enemies to lovers. O dicho a la española, “los que se pelean se desean”.

Rompiendo las reglas

Quizá lo que más sorprenda de esta serie de época es que no tiene nada que ver con otros romances clásicos que hemos visto en pantalla. La música, los diseños que recuerdan a un comic y Nadia de Santiago (a la que recuerdas de Las chicas del cable) rompiendo la cuarta pared hacen que la serie se actual y moderna, sin salirse de la ambientación elegida.

La propia actriz revelaba en una entrevista para Telva que la serie “transcurre en 1800, pero también podía suceder en el tiempo presente, así que podías incluir gestos muy actuales.”

Aunque esto no quiere decir que la serie no haya sido todo un desafío para Santiago, que tiene tablas de sobra para afrontar el reto. La actriz, que ha encarnado la evolución de la mujer española en la historia a través de otras ficciones como Las chicas del cable (los famosos años veinte), Las 13 rosas (década de los treinta), y Amar es para siempre (décadas de los cincuenta, sesenta y setenta) ha tenido que aprender el lenguaje del abanico, enfrentarse al terror del corsé y aprenderse el manual del cortejo de la época.

Y aun así, parece que su mayor reto ha sido precisamente enfrentarse a la moderna ruptura de la cuarta pared. “Para mí era muy extraño romper, de repente, la energía de una secuencia y mirar a algo tan poco vivo y tan intimidante, a veces como un objetivo. Estás dentro de una situación, sintiéndola y viviéndola con tus compañeros, y has de irte y luego, a veces, incluso volver”, aseguraba la intérprete para Telva.

Lo del corsé acabó por imposible. La actriz aseguraba que no le permitía hacer los descarados movimientos que caracterizan a su protagonista. Y el propio diseñador al cargo del vestuario de la serie, Pepe Reyes, coincide con ella. “Las protagonistas no paran de moverse, en una época en la que las mujeres eran meros objetos de decoración”, explicaba el diseñador, haciendo gala de aquello que Neire ya nos adelantaba. La serie rompe con todos los moldes, y nos revela a protagonistas fuertes en roles que no son los tradicionales.

Un romance de los que no quedan

Pese a todo lo moderno de la producción, lo cierto es que Manual para señoritas viene a darnos aquello que todas deseamos cuando nos acercamos a series como esta: un romance de época, de los que se cuecen a fuego lento y explotan en llamas.

Porque, como los propios protagonistas aseguran en diversas entrevistas, ya no quedan amores como los de antes. Ahora todo es inmediato, todo lleva prisas. Aquí vamos a disfrutar de cortejos, discreciones y miradas cargadas de intención, de mano de un reparto de lujo que se completa con la participación de Isa Montalbán, Zoe Bonafonte, Iratxe Emparán, Tristán Ulloa, Carloto Cotta, Paula Usero, Candela Pradas, María Barranco, Itziar Manero, María Caballero y Gracia Olayo.