Sandra Barneda paraliza la tensa hoguera final de Montoya y Anita en ‘La isla de las tentaciones’: “Atendedme”

La hoguera final de Montoya y Anita en ‘La isla de las tentaciones’ es uno de los momentos más esperados de la noche pero Sandra Barneda se ha visto obligada a intervenir

Sergio Rapado
Sergio Rapado

Periodista especializado en corazón y televisión

Sandra Barneda
Telecinco

Las hogueras finales de ‘La isla de las tentaciones’ son uno de los momentos más esperados por todos los seguidores del programa para conocer cuál es la decisión que toman las parejas al finalizar la aventura. Este miércoles hemos podido ver el encuentro entre Montoya y Anita, dos de los grandes protagonistas de la edición. Sin embargo, la tensión estaba muy presente, tanto que incluso Sandra Barneda ha tenido que paralizar su tensa conversación con una clara petición a los dos.

Tanto una como otro han caído en la tentación aunque ellos consideran que no ha sido lo mismo. Primero fue la catalana la que se dejó llevar con Manuel González, provocando que el sevillano se rompiese y protagonizase algunos de los momentos más virales de todo el programa. Tras ello, el andaluz hacía lo propio con Gabriela dejando claro que en ningún caso era por despecho, si no por disfrutar de la experiencia y porque realmente tenía ese sentimiento hacia la murciana.

La tensa hoguera final de Montoya y Anita en ‘La isla de las tentaciones’

En el último programa nos habíamos quedado con la miel en los labios tras ver la llegada de Anita a la hoguera final. Su actitud era desafiante, ya que lo que había recibido de su pareja era algo desconocido para ella. La pareja ha comenzado a echarse cosas en cara. “Eras el amor de mi vida”, decía ella. “Yo he sido yo, como he sido”, respondía él. “A lo mejor no te conocía de verdad”, sentenciaba ella. “No te conocía yo”, respondía Montoya.

La pareja comenzaba a ver las imágenes de su paso por la isla. “Por primera vez he pensado en mi felicidad. Yo no sé qué historia ha contado por ahí de si tenía carencias conmigo. Eras el hombre de mi vida”, decía ella ante la actitud de su chico tras ver su infidelidad. “A los cinco días...”, apostillaba él sobre el poco tiempo que tardó en serle infiel. “Porque no te reconocía en lo que veía”, se justificaba Anita.

Montoya y Anita
Telecinco

En ese momento el sevillano intentaba responder a lo que su novia estaba diciendo, aunque la tensión estaba más que presente entre ellos. Por ello, Sandra Barneda se veía obligada a interrumpir su conversación. “A ver Montoya, has pasado a otro tema. Ella ha dicho las carencias y que no te quería lo suficiente, ¿es verdad?”, consultaba ella.

“Yo me he echado una maleta encima, he estado apoyándola y a veces dejaba de pensar en mí, no podía sacar mi esencia. Para mí la relación ha sido perfecta hasta el primer visionado que me fallaste y te saltaste todos los límites”, explicaba el sevillano sobre lo que había tenido que ver. “Yo caí en la tentación con Manuel porque yo desde el primer momento vi actitudes de Montoya que no lo reconocía en ninguna. En la ceremonia de collares estuviste más pendiente de darle las gracias a Sandra que de decirme a mí que estuviera tranquila”, aclaraba Anita.

Sandra Barneda paraliza la hoguera final de Montoya y Anita en ‘La isla de las tentaciones’

El siguiente momento ha sido el que han podido ver a Anita en la cama con Manuel. “Mírame a la cara que quiero ver a mi Anita en algún momento. ¿Merecía esto de verdad?”, preguntaba el andaluz tras hacer algunos aspavientos a los que nos tenía acostumbrados en cada entrega del programa. “¿Y yo? Me pasaba todo el día llorando”, confesaba ella sobre lo mal que lo ha pasado también.

Montoya y Anita
Telecinco

Pero la pareja no paraba de echarse cosas en cara y esto no ha pasado desapercibido para la presentadora. “Anita y Montoya atendedme, voy a intentar que os escuchéis”, se sinceraba ella. “Por favor, Montoya, necesito...Trata de estar tranquilo, venga”, decía tras escuchar a Montoya pedirle esa tranquilidad.

De hecho, el sevillano se calmaba y conseguía dedicarle unas palabras. “Yo venía muy enamorado de Anita. Para mí era una oportunidad de reforzar la seguridad en ella. Yo esperaba ver a mi novia bailando con todos los chicos y no saltándose los límites”, explicaba. De este modo, dejaba claro que él había ido a jugar pero no a sobrepasar los límites que ellos mismos se habían puesto.