Ya está todo preparado para el estreno de ‘El Grand Prix del verano’. Televisión Española empieza una nueva temporada más del concurso más familiar, uno que vuelve a contar con Ramón García como presentador. 14 pueblos diferentes compiten por ver cuál es el mejor de España, pero el atractivo de este espacio no solo está en las alocadas pruebas que plantean. También cuenta con un equipo humano que lo hace aún más especial. Repiten tareas la youtuber Cristinini, la Vaquilla, el dinosaurio Nico y Wilbur. Pero, ¿quién se esconde tras el personaje de Wilbur?
Detrás de Wilbur, el clown que ameniza ‘El Grand Prix del verano’ con sus alocadas malabares, se encuentra Víctor Ortiz (Alicante, 1981). Es un artista polifacético que hasta hace unos años se dedicó a otras labores. Desde muy pequeño, se esforzó por ser uno de los mejores gimnastas nacionales. Se convirtió en campeón de España en la modalidad de acrobacia. Lo hizo al lado de grandes referentes de este mundo como el gran Gervasio Deffer o Oriol Combarros.
El deporte ocupaba buena parte de su tiempo. Hasta que en 2003 cuando decidió dar un giro de 180 grados a su carrera. Lo hizo para poder combinar las otras dos grandes pasiones que tiene en su vida: el humor y la interpretación. Decidió crear el personaje de Wilbur y montó su propia compañía con la que desarrollaba su propio espectáculo, 'Piensa en Wilbur'. Ha cautivado a miles de sus seguidores gracias a un sinfín de acrobacias combinadas con su desparpajo y sus amigos Contractura, Tirón y Desgarro.
Wilbur está convencido de que este personaje estaba en su cabeza desde que era un niño. "Es una mezcla de todas las cositas que a mí me gustan. He visto mucha peli de acción, he visto mucho a Jim Carrey, que es mi cómico favorito… Yo no nací en una familia de artistas de circo o de escenario, y hasta que no me di cuenta de que se podía actuar, pues no me puse a ello", ha confesado Ortíz en una entrevista para el periódico 20 Minutos.
Cómo Wilbur llegó a 'El Grand Prix del verano'
Consiguió hacerse un nombre y cuenta con más de un millón de seguidores en redes sociales. Uno de esos muchos fans era uno de los directores de ‘El Grand Prix del verano’. No dudó en llamarle para ofrecerle ser parte del equipo de Ramón García. "Entonces fue un poco como ‘oye, mira este tipo que a mí me encaja bastante". Y fue un poquito como anillo al dedo. Porque claro, que tenga vis cómica, que se sepa mover, que sepa acrobacias, que sea un poco especialista… Vamos, que si no lo hacía yo, pues poca gente podría hacerlo. Pues pasó a través de redes, como casi todo lo que ocurre ahora...", ha confesado Ortíz sobre cómo fueron sus inicios en ‘El Grand Prix’.
Del Circo del Sol a 'El Grand Prix del verano'
Lo cierto es que ya tenía algo de experiencia porque antes estuvo trabajando en el Circo del Sol. Aunque le encantaba, ha asegurado que exigía demasiado y que siempre ha preferido estar con su número de payaso y no tanto de acróbata: "Como acróbata ya se me hacía más repetitivo. Sí que es verdad que es muy diferente a cuando compites porque te aplauden de otra manera. Es muy bonito, es una compañía multinacional del espectáculo y de los sueños".
En el caso de ‘El Grand Prix’, la experiencia es fantástica, aunque reconoce que le gustaría tener más tiempo para preparar los espectáculos: "Va a toda leche. Al final todo es un poco improvisado y freestyle. Sé que una prueba nunca va a estar montada para yo estar ahí una hora probando cosas. Entonces yo ya me voy imaginando A, B, C, D y luego pues el mismo día, hablo con Ramón, con la directora y de repente pues mira, al final vamos a quedarnos con la B. Yo ya le he pillado hasta el gustillo".
Lo tiene más que interiorizado el papel y su protagonismo en el programa de Televisión Española. Eso sí, le gustaría en algún momento probar suerte como concursante: "Siempre que las paso es con una historieta o con alguna chorrada o disfrazado de algo. Pero sí que me molaría participar y hacer los troncos, por ejemplo. Hay muchas pruebas que no he hecho, pero que me encantaría, la verdad".
Lo que más le gusta y lo que menos de 'El Grand Prix'
Trabajar en ‘El Gran Prix’ le ha permitido conocer de cerca a un equipo maravilloso, entre ellos Ramón García, para el que solo tiene buenas palabras. "Con Ramón muy bien, la verdad. Me llevo genial. Es muy lo que parece, un tío muy natural, con un don. No varía mucho el estar hablando con él en el camerino a que luego le veas presentar", ha dicho sobre él.
Lo que no lleva tan bien son los haters. Reconoce que para él tienen que existir y aunque les tiene cierto cariño, suele pasar bastante de las críticas: "En redes, por lo menos en Instagram, TikTok cuando igual un vídeo pasa de 70 comentarios ya no los leo. No voy a leer un vídeo que tiene 5.000 y pico mensajes. Pero el hater considero que tiene que estar. No sé si en general en la vida del humano, pero el artista tiende a fliparse y de repente estás flotando. Entonces el hater, con todo lo malo que es serlo, creo que te hace un poco de toma de tierra y te mantiene un poquito ahí abajo para que no te flipes".