Pablo López visita ‘El Hormiguero’: del negocio que casi le lleva a la ruina a su discreta vida íntima

No son muchos los afortunados que consiguen cumplir el sueño de hacerse un nombre en el mundo de la música. Millones de personas tienen la aspiración de ser cantantes, pero, para llegar a lo más alto, hay que tener el don de la voz y estar (trabajando) en el momento y lugar adecuados. Es el caso de Pablo López (40 años), invitado de este jueves en el plató de ‘El Hormiguero’. 

Visita a Pablo Motos y sus hormigas para presentar su nuevo tema, ‘La función’. Conmemora su primera década de carrera en la industria. Además, promociona la gira que prepara para este año, ‘Concierto 360 grados. Un piano, una voz’.

Convertirse en el artista consagrado que es hoy, con un Premio Ondas al Fenómeno Musical del Año y un séquito de fans enloquecidos por sus canciones, no le ha resultado nada fácil. Tuvo que trabajar muy duro. Ese éxito le llegó, en parte, gracias a su paso por ‘Operación Triunfo’, donde consiguió quedar segundo con su maestría tocando el piano en la octava edición. 

Desde niño quiso dedicarse a la música, aunque no se le pasó por la cabeza que llegaría tan alto. "He llegado a pensar que no se puede soñar tanto como para lo que estoy viviendo. A veces abruma muchísimo. Como dice la canción, yo me conformaría con la mitad. Pero bueno, queda mucho por vivir todavía. Agradecido a la vida, a la música sobre todo y a la gente que viene a verme a los conciertos, que es lo más bonito", confesó en una entrevista en 20 Minutos el pasado año con motivo del lanzamiento de su quinto álbum. 

Se inició en el periodismo como plan A, pero pronto decidió arriesgarse con el B, la música. Ya había hecho sus primeros pinitos como cantante participando, con tan solo ocho años, en un concurso a nivel nacional. Por aquella época, un jovencísimo Pablo López aprendía los secretos del piano en el Conservatorio de Música de El Ejido, Málaga. Lo puso en práctica por buena parte de los hoteles de la Costa del Sol.

Cansado de no conseguir despuntar, el de Fuengirola hizo las maletas y se mudó a Londres. Se ganaba la vida como camarero mientras ofrecía pequeñas pinceladas de su maestría en el metro de la capital inglesa. Sin embargo, pese a su esfuerzo y dedicación, tuvo que regresar a su hogar porque no consiguió lo que buscaba y la vida era muy cara. 

'Operación Triunfo', un trampolín al éxito

Curiosamente fue en este momento cuando le llegó su gran oportunidad. Su madre fue la culpable de su éxito. Le obligó a presentarse al casting de la octava edición de ‘Operación triunfo’ cuando tenía 24 años. Durante su paso por la Academia más famosa de la pequeña pantalla, Pablo López recibió casi más críticas que loas, pero su arte finalmente consiguió conquistar a todos excepto a Risto Mejide, conocido por su dureza con los concursantes.

Supuso el inicio de su exitosa carrera. ¿El secreto? "Tener sobre todo paciencia y coherencia. Vivimos en un momento y en un lugar en los que si se pierde la coherencia, puedes fácilmente perder el vuelo. La estabilidad y el equilibrio son lo más importante. Lo que más cuesta es tener la cabeza en el suelo para poder seguir haciendo cosas", decía en esa misma entrevista.

El negocio que casi le lleva a la ruina a Pablo López

Su primer disco tuvo una gran acogida mientras que con el segundo se consagró como artista. Cuenta con una de las mejores voces del país, aunque destaca más (aún) en su faceta como compositor. Ha escrito canciones para grandes artistas de la talla de Antonio José, Antonio Orozco, Raphael y Malú, entre otros muchos. 

En lo que no ha tenido mucha fortuna es en el ámbito empresarial. Junto a su hermano, el malagueño decidió aventurarse en el mundo de la noche montando un bar de copas que casi le lleva a la ruina. "Lo teníamos lleno siempre. Había 80 o 90 personas, y era una ruina absoluta", confesó en una visita pasada a ‘El Hormiguero’.

Como suele pasarle a muchos locales nocturnos, las quejas de los vecinos por el ruido eran una constante: "Cuando te llama el vecino adyacente al bar un día que está cerrado, estás en tu casa, y te dice 'por favor, ¿no podéis bajar la música ya?'. Fíjate tú el 'por saco' que estaríamos dando que creían que nos escuchaban. Me di cuenta de que me tenía que dedicar a lo único que yo creía que iba a poder hacer, que es hacer canciones". 

Esta aventura casi provoca la ruina de ambos. "De lo bien que lo pasamos, se convirtió en una catástrofe. Nos cortaron la luz, el agua… Ahora me río, pero estábamos llorando de verdad. Teníamos una deuda tremenda, pero yo creo que fue el máster más barato que he pagado en mi vida", contó.

Su discreta vida íntima al lado de Laura

Son muchos los nombres que se le han adjudicado a Pablo López a lo largo de esta década de trayectoria musical. Estuvo saliendo con la periodista Claudia Nieto y antes se llegó a decir que algo tuvo con Sara Carbonero, Malú y Lola Índigo. Pero nunca se ha llegado a confirmar porque es un artista de lo más receloso con su vida privada.

En la actualidad, comparte sus días al lado de Laura Rubio (33 años), a la que conoció en ‘La Voz’ cuando ella se presentó al formato. La química entre ellos traspasó la pequeña pantalla aunque es cierto que su relación no comenzó hasta tiempo después, en 2021. Llevan una vida de lo más discreta alejada de los focos y son pocas las ocasiones en las que se dejan ver públicamente juntos.