Pablo Castellano (37 años) no solo se ha posicionado como el concursante revelación de 'El Desafío', también lo ha ganado tras una reñida final. El arquitecto ha tenido que enfrentarse a un reto de funambulismo sobre bicicleta, uno que ha dejado sin palabras a Pilar Rubio, Santiago Segura y Juan del Val, los componentes del jurado del concurso. Con este reto ha conseguido lo que muchos ya se imaginaban: es el ganador de 'El Desafío'. Su victoria ha supuesto varias cosas. Pablo puede presumir de que ha acabado con éxito su primera participación en un concurso televisivo. También ha sido la oportunidad perfecta para que el gran público le conozca más allá de ser el marido de María Pombo. Por otro lado, también se ha conseguido un premio solidario de 30.000 euros.
¿En qué se va a gastar Pablo Castellano los 30.000 euros que ha ganado en ‘El Desafío’?
El marido de María Pombo ha conseguido el voto unánime del jurado del concurso. Partía como uno de los grandes favoritos por la evolución que ha tenido a lo largo de cada emisión, pero no las tenía todas consigo. Ha tenido que batir a Chenoa, Adrián Lastra y Marta Díaz. La cantante lo ha dado todo en una coreografía sobre un balancín, mientras que el actor ha luchado por la victoria con un desafío de pole dance. La influencer se ha enfrenado a un reto de percusión con instrumentos "excéntricos". Sin embargo, el funambulismo de Pablo ha convencido más al jurado.
Una de las cuestiones por la que han luchado los concursantes de ‘El Desafío’ ha sido el premio solidario de 30.000 euros. Se trata de una cantidad que el ganador puede destinar a una causa benéfica de su elección. Nada más que Roberto Leal le ha otorgado el cheque, el concursante lo ha tenido muy claro. De hecho, trataba de recomponerse para poder expresar lo que tenía pensado. "La verdad es que me gustaría repartirlo con mis compañeros y que cada uno done la parte correspondiente a la ONG que quiera", decía mientras trataba de contener las lágrimas.
Lo cierto es que no ha querido revelar la ONG a la que él va a donar su parte del premio, algo que tampoco ha especificado cómo quedarían esas divisiones. Sin embargo, cuando Pablo consiguió ganar una gala del programa tuvo clara su elección y es muy probable que repita asociación por toda la carga emocional que implica para él. En su momento ya eligió a la asociación EME, entidad a la que ya le otorgó la cuantía que recibió al ganar una de las entregas del concurso. "Sabéis que es una asociación de esclerosis múltiple, mi mujer la tiene", dijo entonces, quebrándose entre lágrimas. "Está muy controlada hoy en día. Es simplemente que me emociono, no por nada. Mi suegra también la tiene, que por desgracia no está tan controlada", añadía.
Una ajustada final de 'El Desafío'
Pablo Castellano ha llegado a la final como uno de los favoritos. La organización ha tenido en cuenta muchas las indicaciones y quejas del concursante y ha hecho excepciones con él que hasta ahora no se habían visto. Le permitieron repetir la prueba de la apnea, ya que cuando la realizó no se encontraba en las condiciones óptimas. Quería sí o sí mejorar su marca. La mejoró en más de un minuto. Pasó de 2 minutos 42 segundos a 3 minutos 55 segundos.
Ganar 'El Desafío' es un sueño cumplido para Pablo Castellano. El vínculo con el programa lo creó cuando María Pombo se atrevió a formar parte de esta peculiar aventura. Su mujer formó parte del equipo de celebrities que participó la edición anterior. Ella misma reconoció que ver a su marido ganar un programa era muy gratificante para ella: "Alucinada, nerviosísima y encima con una felicidad de que traiga un premio a casa, por fin. Yo nunca pude. Se lo merece tanto. Veo su esfuerzo en casa, que entrena hasta con anginas. A día de hoy, está con antibiótico. No podía ser de otra manera. Tenía que ganar sí o sí".
Le ha costado sacrificio, sangre, sudor y muchas lágrimas. La culpa de esto último la tienen sus rivales, especialmente Chenoa, Marta Díaz y Adrián Lastra, quienes le han acompañado en la final. La rivalidad es obvia, pero la caradería también. De hecho, Pablo y Adrián han creado una de las amistades más bonitas que se recuerdan en el plató. Se consideran "hermanos", pero sus primeras impresiones no fueron buenas. "Cuando conocí a Pablo, dije: 'A mí no me entra'. Había una cosa de energía…", confesó el actor en su última visita a 'El Hormiguero', quien confesaba el calificativo con el que su novia conocía a Pablo: una ameba. Estas palabras han dejado en shock a su amigo.