La organización de 'Supervivientes 2025' cambia de idea y emite imágenes inéditas del último enfrentamiento en la isla: "Vende pena, eso, vende"

Hace unas horas se vivía en Honduras uno de los enfrentamientos más duros que hemos podido ver en los más de 40 días que llevamos de concurso. La visita de Carlos, marido de Laura Cuevas, alteraba a la participante y ambos protagonizaban un duro momento que la organización del reality decidió no emitir en su totalidad. Gritos, reproches, faltas de respeto... La pareja no dudó ni un segundo en decirse todo lo que pensaba el uno del otro. 

Recordamos que hace unas semana vio la luz una información que hizo saltar por los aires el matrimonio de la pareja: Laura ha sido infiel a Carlos en varias ocasiones. Y aunque él sabía de la primera porque les pilló en la cama, lo cierto es que se enteró de una segunda porque ella se lo contó a sus compañeros en Honduras. Una información que él cree no debería haber compartido en pleno directo sino que se debería haber hablado en privado y solo entre ellos. 

Después de haber ido a algunos platós de Telecinco a contar cómo se sentía tras enterarse de los affaires de su mujer, Carlos ha visitado Honduras, donde ha protagonizado junto a Laura uno de los momentos más tensos de la edición. De hecho, este lunes 14 hemos podido ver las imágenes inéditas de este desencuentro. 

"Vende pena, eso. Vende pena", le dice Carlos a Laura mientras ella está "mirando al horizonte". "No aproveches para manipular. No he dicho nada", contesta ella entre gritos. "Ni una cosa bonita me has dicho. Ni una. Me has puesto verde. No cambies de argumento que te encanta", relata él entre aspavientos. "Lo único que he dicho es que no me gusta la vida que tenemos", reconoce Cuevas. "Por tu culpa. A mí tampoco por tu culpa", expresa él también. 

El duro enfrentamiento de Laura y Carlos en Honduras. 

"Lo que tienes que hacer es trabajar. Que estás todo el día sin hacer nada. Asume responsabilidades", dice él muy enfadado. "No te preocupes que cuando llegue a España las asumo. Que tengo ya la maleta hecha. Que ya sé cómo te manejas tú, que este verano fuiste a mi trabajo para que me largaran", acusa Laura. "Pero si viniste tú porque no tenías donde caerte muerta", contesta él. "Sí, eres tan retorcido que me despidieron por tu culpa. Fuiste para que me quedara sin nada y tuviera que volver contigo. Ese eres tú. Y me echaron", hace hincapié la hija del extrabajador de Cantora. 

Totalmente sorprendido por la acusación de Laura, Carlos se preguntó quién era él y qué poder tenía en los sitios para conseguir eso, unas palabras que le dolieron mucho. "A partir de ahora no cuentes conmigo para nada. Vas buscando rango. Cuando entraste a trabajar en el restaurante empezó a tirarle cuello a las dos semanas estando conmigo a un jefe de cocina mientras yo estaba en Ibiza. Y el tipo te dijo que no", revela el marido de la participante. 

"Eso es mentira", contesta tajante Laura, asombrada con la gran discusión que estaban teniendo en pleno directo. "Tú estás aquí por mí. Mientes más que respiras. Manipulas a todos. No haces nada en la isla y ni te nominan. Tienes que cambiar el chip, te lo digo por tu bien porque esta mierd* la has encendido tú", relata él de nuevo. "Yo no he encendido nada, solo he dicho que quiero cambiar mi modo de vida. Fin", explica Cuevas.

"También has contado que no foll*mos. Esas cosas son tuyas y mías y si no lo hacemos es una cosa sola de los dos", reprocha Carlos a su mujer, que intenta defenderse diciendo que en Honduras pasan muchas horas y entonces es normal que se abran a otros compañeros. "Cuando hables de mí hazlo con respeto y si no te metes la lengua en el culo. Me pones los cuernos pero encima el malo soy yo", dice el marido de la participante, que le pide que no trabaje tanto y le aporte más tiempo a la pareja. 

"Tú estás todo el día trabajando y estudiando, lo que no voy a hacer es estarte esperando", concluye Laura. "No quiero que me esperes, quiero que trabajes", termina él sobre la situación marital que tienen en casa. Sin duda una lluvia de reproches que por ahora no sabemos si tiene solución.