Mario Vaquerizo (50 años), que este mismo lunes ha dado la última hora sobre su estado de salud a través de las redes sociales junto a una fotografía en la que aparecían muchas figuras religiosas mientras estaba en la cama en el hospital, ha sorprendido a todos los espectadores de 'El Hormiguero' conectado en directo desde la cama en la que continúa ingresado. Con muy buena actitud frente a este bache, el cantante de las Nancys Rubias ha asegurado que "por suerte" está "bien", aunque todavía le queda para que le den el alta.
Dando las gracias por poder hablar en directo con el presentador, Mario ha asegurado que el golpe podría haber sido "mortal" y que ha sido un "susto muy grande", aunque confía en que tiene a un ángel de la guarda que siempre le protege: "Tengo muchos amigos que estáis pendientes. Esta llamada me hace mucha ilusión. Creo que los amigos siempre curan las heridas y es la mejor medicina que podemos tener. Estoy en el Ramón y Cajal", ha revelado.
Mario, que se ha lamentado que solo pudo cantar un tema de su repertorio antes de caerse y darse el golpe desde el escenario, ha pedido perdón a todos los que fueron a verle porque se llevaron un gran susto. "Ahora mismo os estoy viendo como si fuera en braille porque he perdido un poco de visión, no la tengo clara porque la contusión fue tan fuerte que me ha afectado a los dos ojos. A ti Pablo, que normalmente te veo guapísimo, hoy te veo borrosito. Pero las facciones son las mismas: mismo pelazo y sonrisa", ha bromeado el cantante.
Entre risas para quitar un poco de hierro al asunto, Vaquerizo ha explicado que le están haciendo pruebas tanto oftalmológicas como neurológicas para descartar cualquier daño, pero además también ha comentado que debe descansar y reposar porque tiene varias vértebras afectadas y el cuello "a la virulé". "Aún me queda. Aquí las cosas van despacio y me han pedido mucha paciencia. Sorprendentemente todo el equipo me ha dicho que soy muy buen paciente. Me han dicho que la recuperación va a ser lenta y siempre creo que las cosas de palacio van despacio. Con sentido del humor y mucho mariconeo creo va a ir todo mucho mejor", ha asegurado.
Pablo además ha querido saber cómo lleva el mono de tabaco y de cerveza desde que está ingresado. Y es que el artista suele estar siempre con una lata en la mano y es un fiel defensor del "zumo de cebada". "Vamos a poner a esto sentido del humor. No hay mal que por bien no venga. Este golpe a mí me ha dejado peor de lo que estaba. No lo he echado de menos, ninguna de las dos cosas. Me pusieron parches de nicotina, ¡ni que fuera yo la tabacalera española! Tampoco fumo tanto... Cerveza sí bebo porque es vitamina B pero no la he echado de menos. Lo que me preocupa es que no he parado de comer, y de comer chocolate. Tengo miedo de pasar de ser la nancy esbelta a la gordita", ha bromeado Mario.
Sobre su medicación, Vaquerizo ha desvelado que le han puesto muchos corticoides para bajar la inflamación y quitar el dolor. "Me gusta la medicina por vena porque es mucho mejor", ha afirmado. Eso sí, el artista ha reconocido que ha tenido efectos secundarios como que le de por comer y sobre todo por hablar. "Tengo mucha incontinencia verbal", ha asegurado entre risas, contando además que tiene un enfermero que le lava el pelo y que en los próximos días le va a afeitar.
"No me permito que me den bajones por cómo soy. Ayer tuve un día un poco flojo porque me preocupo por los demás. Si Alaska era la mujer de mi vida ahora es más, ahora también es mi enfermera sexy. Está todo el mundo pendiente de mí", ha dicho mientras mostraba a todos los santos que tiene en la mesilla que le ayudan y le protegen mientras está en el hospital. Sobre la vista, Mario ha contado que su pronóstico por ahora es "reservado": "Ellos tampoco quieren pillarse. Es cierto que no ha habido ningún corte que haya afectado al nervio óptico pero está inflamado. Tengo mucho líquido acumulado que no me permite ver con nitidez. Esto va a ir lento. Leo de izquierda a derecha porque veo poquito a poco. Se me va la cabeza, no sé que me has preguntado", ha dicho provocando las risas de todo el plató.
"Veo muchos helechos fluorescentes. Estoy como si estuviera de colocón. Veo arreglos florales en la pared de en frente. Cierro los ojos y veo explosiones fluorescente. Y dinosaurios chiquititos. Tiranosaurio Rex. La medicación es muy buena. El dolor era tan fuerte que no me podía poner de pie porque se pinzaba el nervio, hoy ha sido el primer día que no me han tenido que poner más medicamento", ha concluido en Antena 3.