Las lágrimas de Belén Esteban tras la importante confesión de Escaleto sobre su cáncer

Este jueves en ‘Ni que fuéramos shhh’ sorprendía la presencia de Escaleto tras varios meses de ausencia. Durante semanas los seguidores del programa preguntaban por el colaborador aunque en ningún momento se habían ofrecido detalles del motivo de no estar presente en el programa. En su regreso ha querido confesar él mismo los motivos de esta ausencia, ya que ha estado siendo tratado de un cáncer. Durante su relato en el que se ha abierto en canal, Belén Esteban (51 años) no ha podido contener el llanto en pleno directo.

La insistencia de todos los seguidores obligó en cierta medida a que dieran alguna explicación, por breve que fuera. “Por cierto, hay muchas dudas, todo el rato preguntáis por Escaleto. Escaleto está bien, nos está viendo desde su casa. Tuvo un pequeño contratiempo y volverá cuando pueda”, expresaba Javier de Hoyos en una de las pausas publicitarias para poder tranquilizar a la audiencia. Sin embargo, este jueves ha sido él mismo quien ha querido hablar largo y tendido de su proceso oncológico.

Las lágrimas de Belén Esteban tras la importante confesión de Escaleto sobre su cáncer

“Me daba miedo de volver. Siete meses, ha sido mucho tiempo”, comenzaba diciendo Escaleto en su regreso al programa. “¿Qué no ha pasado? No he tenido un hijo por gestación subrogada, no me han secuestrado Javi de Hoyos, no me han echado. No ha pasado eso. Ha sido mucho más simple y llano, algo que le pasa a mucha gente que tiene seis letras: cáncer”, expresaba visiblemente emocionado.

Tras ofrecer todos los detalles del proceso en el que se encuentra en la actualidad y las buenas noticias de estar recuperado, sus compañeros han querido arroparlo. De hecho, Belén no podía contener el llanto e intentaba secarse las lágrimas sin que su compañero pudiera verlo. La emoción ha estado muy presente en el pisito, tal y como ellos mismos llaman al plató donde graban el programa.

No obstante, Esteban conocía la existencia de esta enfermedad aunque al escuchar cómo lo contaba sus lágrimas han comenzado a caer por sus ojos. “Kiko lo supo y la gente se dio cuenta porque las vacaciones se estaban alargando mucho. Todo el mundo ha sido muy discreto. A las pocas semanas me suena el teléfono y era Belén Esteban. Pensaba que se había enterado”, confesaba Escaleto sobre su conversación.

“Me dijo que estaba muy enfadada conmigo porque no se lo había contado. Yo no quería que se pusiera mal”, continuaba relatando mientras la de Paracuellos del Jarama más lloraba tras haberse fundido en un precioso abrazo. “Me preguntaba todo el rato por qué no se lo había contado, me decía que me llevaba la comida, me llevaba al médico… Que mis padres se vinieron aquí y me ayudaron, yo no quería que Belén se pusiera así. A todo el mundo que me ha llamado y me ha escrito le he dicho la verdad”, explicaba sobre el ofrecimiento de su compañera.

Pero este gesto no ha sido el único que ha querido destacar Belén. Más allá de haberse ofrecido para ayudar en todo lo posible a su compañero, también ha querido contar lo mucho que le afectó enterarse de la enfermedad de su compañero. De hecho, ha revelado que tras hablar con Escaleto inmediatamente llamó a Kiko Matamoros llorando, ya que era el único que conocía esta información.

Escaleto confiesa cómo conoció su cáncer

El colaborador del programa de TEN ha querido contar cómo conoció que padecía esta enfermedad. “Empezamos el programa el 15 de mayo y no sé la fecha y en la ducha de repente en un testículo me di cuenta que estaba hinchado. No soy hipocondríaco. Me vine a trabajar normal, a los días seguía y pensaba que se iba”, comenzaba diciendo. “Fui a mirármelo pero no pensaba que era cáncer. Jamás se me pasó por la cabeza por la edad. Hicimos una eco y me dijo que podían ser muchas cosas”, relataba.

“Vi el informe. La vista se va a diagnóstico y ponía: ‘Masa sospechosa de malignidad’. Me quedé con esas palabras. Cuando lo leí pues buena pinta no tenía”, se sinceraba sobre la preocupación que comenzó a aflorar. “Todo me parecía como si estuviera en una serie de Netflix. Con las mismas pues se activó un protocolo muy rápido: análisis, tacs, pruebas… En esa rueda lo haces automáticamente sin pensar en qué va a pasar o suceder. Pensaba el marrón de cómo decirlo en el trabajo, a mis padres, a mis amigos… No es agradable de decir. No me acuerdo a quién se lo dije primero”, continuaba contando.

Sin embargo, ha demostrado tener la mejor actitud posible ante esta enfermedad. “No me he cabreado en ningún momento, ni he pensando que el mundo contra mí. No soy dramático. Pensaba en que momentáneamente me iba a cambiar la vida. No sabía tampoco el grado. Pensaba hasta dónde podía llegar. Es una putada pero al final se soluciona”, expresaba. “Me operaron, analizaron el tumor y era cáncer con buen pronóstico. Además de la cirugía he tenido ciclos de quimioterapia. Todo ha ido bien porque estaba localizado”, confesaba tras indicar que debe continuar con las revisiones habituales.