Siempre hay que seguir intentándolo cuando se trata de encontrar a la persona adecuada con la que compartir tus días. Mercedes (82 años), una cigarrera jubilada de Madrid, ha puesto todo de su parte acudiendo a ‘First Dates’. Sin embargo, la suerte no la ha acompañado. Estuvo casada con un hombre maravilloso, el amor de su vida, hasta que falleció cuando apenas tenía 56 años. Tuvo la suerte de encontrarse con otra ilusión, con la que estuvo dos décadas pero, desgraciadamente, murió de forma repentina.
Lleva un tiempo que no levanta cabeza porque sus dos amores terminaron en tragedia. "Ya puede tener cuidado el siguiente, si lo hay", le ha comentado a Carlos Sobera (64 años) a su llegada al dating show. La ilusión no le acompaña ultimamente.
"Me gustan que sean honestos, formales, tipo amistad y luego ya lo que sea", ha pedido antes de intentar tirarle los trastos a Carlos Sobera. Le ha presentado a José Luis (83 años), un médico jubilado de Toledo, que acudía por tercera vez al programa de citas.
A la tercera no ha sido la vencida. Mercedes ha mostrado su descontento nada más aparecer por la puerta. "¡Madre mía de mi vida!", ha exclamado ante las cámaras de ‘First Dates’ al ver que no podía prácticamente ni caminar por una fascitis plantar. Lo ha visto demasiado mayor: "Me esperaba uno de otra edad, no me esperaba uno de 70 años pero vamos, tampoco eso. Que no puede andar el hombre ese".
José Luis tampoco ha conseguido ganarse el afecto de Mercedes durante la cena. No le ha gustado que se pase toda la cita hablando de él mismo. "Vivo en Toledo capital, a tres o cuatro kilómetros de una casa que hizo mi mujer con jardín. He sido médico, especialista en digestivo. Me quedé viudo, tuve una cosa que no cuajó y ya no he tenido más", ha explicado. Mientras él hablaba, ella pensaba en su edad: "Es mayor para mí. A lo mejor tiene menos años pero yo me veo capacitada para algo más joven".
"Me fui a Alemania con una familia y como siempre he tenido BMW quise conocer la fábrica. Me fui a Múnich y al director general le caí muy bien y todavía somos amigos. Hice amistad, me metió de probador de los coches y fui ascendiendo y terminé de jefe de probadores. Acabo de volver de Alemania y voy frecuentemente", ha seguido contando José Luis ante la cara de aburrimiento de Mercedes. "No he abierto la boca, es que no me ha dejado", se quejaba. El médico jubilado ha querido saber más de ella. Le ha preguntado por su vida, pero para ella ya era tarde. Se ha limitado a decir: "No, no me dejas hablar pero no tengo mucho que contar. Se murió mi marido y ya está".
Ante esto, José Luis ha seguido contándole su vida a su cita, pero sin éxito de que articulase palabra. Tampoco es que haya estado muy acertado con el tema. En vez de hablarle de cosas alegres, le ha contado sus problemas médicos.
"Debo mi vida a dos mujeres. Una noche cenando con mi segundo hijo, me puse muy malo y tenía Covid. ‘Vienes muy mal, quédate aquí en el hospital que veo la cosa muy mal’, me dijeron. Total que me tiré tres meses. Luego después tuvieron que operarme de cáncer de colon. Fui al hospital y me cogió una cirujana canaria y me operó con una peritonitis intestinal que es algo gravísimo y me salvó la vida", decía ante una impávida Mercedes. Ella solo le ha criticado ante las cámaras de ‘First Dates’. "He venido a hablar de actualidad y de cosas, de amores… a lo que se viene aquí. Para penas tengo bastante con las mías", se quejaba.
Uno y otro han dicho no a una segunda cita, pero mientras que él ha puesto la excusa de su vida entre Toledo y Alemania, ella ha sido sincera. "No, tampoco tendría una segunda cita. Primero por la distancia y lo segundo es que no es mi perfil. Que te vaya muy bien por los mundos de Dios, por Alemania y por ahí", le ha espetado.