El enfado monumental de Jordi Cruz por lo que se ha visto en ‘MasterChef’: “Ha sido lamentable”

La gala de anoche de ‘MasterChef 13’ fue una de las más intensas hasta la fecha. Tras varias pruebas de eliminación bastante complicadas, finalmente el jurado terminaba expulsando a una de las aspirantes a chef que además hizo una sorprendente confesión antes de irse que dejó a todos los presentes totalmente en shock. Pero además de esto pudimos ver unos comportamientos por parte de los concursantes que no terminaron de encajar con el jurado, especialmente con Jordi Cruz, que no tuvo reparos a la hora de echarles en cara su actitud de manera bastante tajante.

Jordi Cruz se enfrenta a los concursantes de ‘MasterChef’

Yago y Clara se convertían anoche en los capitanes dentro de la fase por equipos, eligiendo a sus integrantes según sus relaciones personales. Sin embargo, el jurado tenía un As bajo la manga y a mitad del programa les obligaban a cambiar de equipo, por lo que Clara pasaba del equipo rojo al azul, donde no estaban las personas con las que mejor se llevaba. De esta manera, aunque la profesora valenciana intentaba por todos los medios hacerse con el grupo de Yago, no hubo manera de que estos siguiesen sus indicaciones. "Aquí no me hace caso ni Dios", expresaba la mujer totalmente desesperada al ver que nadie se dirigía a ella ni respondía sus preguntas.

"La actitud del Equipo Azul, como grupo, ha sido bastante nefasta. Me parece una actitud lamentable como compañeros. Entiendo que te descuadre, porque querías que estuviera tu amiguito, pero aquí hemos venido a jugar. Si estoy de capitana, también es tu tarea ponerme al día de las elaboraciones", dejaba claro la capitana tras lo que había tenido que vivir con ellos, comparando su actitud como la de un “patio de colegio”.

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— MasterChef (@MasterChef_es) April 21, 2025

Pero ella no fue la única que se percató, ya que Jordi Cruz también fue testigo de esto y enseguida la defendió: "Creo que tenías muchas ganas de hacerte valer como líder en el Equipo Azul, pero no has logrado imponer tu autoridad", le decía, respondiendo Clara que no quiero pelear con nadie, denunciando simplemente el trato que recibió por parte de ese grupo.

"Yo he preguntado en voz alta varias veces y no se me ha contestado. No sé por qué ha sido. Creo que estaban muy amoldados a Yago y no les ha venido muy bien el cambio", sentenciaba, aunque el equipo azul negaba todo esto. Bea afirmó que no la escucharon por “el jaleo de fondo”, excusa que no sirvió de nada al jurado: "Hay que hacer por escuchar. En el emplatado, la capitana ha dicho que Víctor y Chema fuesen a la carne, pero Víctor se ha ido al otro lado", le respondía Cruz.

Víctor intentaba defenderse y justificar sus gestos alegando que Clara nunca le dijo que regresase a su puesto, aunque ella aseveraba habérselo “dicho claro”, provocando una actitud bastante prepotente por parte de su compañero y consiguiendo que Jordi la defendiese de nuevo: "Clara lo ha dicho clarísimo. Mi opinión es que habéis pasado de ella olímpicamente. Clara, me ha gustado tu actitud, pero, si no te hacen caso, me sirve de poco".

La confesión de la expulsada de la noche

Tras este tenso momento llegaba la última prueba de la noche, una de lo más complicada en la que una de las componentes del 'El eje del mal', formado por Elena, Yago y Gabriela, tenía que decir adiós a sus compañeros y a su gran sueño. En este reto contaron con la presencia de Pocholo en plató, que asignó diferentes tipos de ajo a los concursantes para la elaboración de sus platos, a los que además debían añadir gusanos, saltamontes, cocodrilo o canguro.

Finalmente Elena era la elegida para abandonar el talent show, siendo la mayor fanática del mismo y habiendo intentado entrar hasta en seis ocasiones. Antes de irse, la mujer quiso hacer una confesión: “No cocino con gusto ni olfato, porque no tengo desde que me operaron”, dejando a todos los presentes totalmente sorprendidos.

Pepe Rodríguez mostró su descontento con el hecho de no haber sabido este factor durante el concurso, señalando que le habría gustado poder ayudarla en la preparación de sus platos. “No me parecía justo, ni correcto”, sentenciaba Elena antes de irse, estallando en lágrimas. “Estoy feliz porque he cumplido un sueño y me lo he pasado fenomenal”, concluía.