Carlos Sobera (62 años) tiene sentido del humor. Lo ha demostrado en alguna que otra ocasión. Esta vez ha hecho alarde de él en 'First Dates'. El presentador recibió a Álvaro, un joven alicantino que se había desplazado hasta el restaurante del amor para encontrar una nueva pareja. Como viene siendo habitual, el televisivo compartió unos instantes con él para que así la audiencia le pueda conocer mejor antes de su cita. Confesó que cuando alguien le gusta alguien es frío: "No demuestro a esa persona lo que siento, quiero que vengan a mí". Sobera se dio cuenta de que es un chico bastante expresivo. "Sí, es que hago vídeos en TikTok y cosas de esas", le dijo. Lo que el presentador no se esperaba era la temática.
Álvaro es conocido en redes sociales por sus reportajes y por poner de moda en Twitter la expresión 'Tracatrá'. "Hago vídeos sobre cruising", le respondió el alicantino ante la curiosidad de Sobera. "¿Sobre cruceros?", preguntó el presentador de Cuatro extrañado. Nada que ver con la realidad. "Hacer cruising es que las personas adultas se encuentran en lugares públicos de repente, como parques o baños de centros comerciales, zonas discretas, para 'tracatrá' y adiós", explicó el comensal a las cámaras de 'First Dates'.
Asegura que lo hace por curiosidad y diversión. Se considera algo así como "un guía turístico" de esta clase de sitios. "Es un: 'Mira, chicos, aquí hay un sitio. Donde más gente hay es en esta zona y a esta hora se pone fuerte'", explicó a Carlos Sobera y a Matías, que escuchaba atento tras la barra.
Confusiones aparte, llegó el momento de conocer a su cita: Adrián, un sosegado técnico de laboratorio. Las primeras impresiones fueron buenas. Álvaro se interesó (y mucho) por el trabajo que desempeña su cita, pero terminó confesando que no entendía esa profesión. "No quiero parecer ignorante, pero no sé lo que hace. No me he enterado", dijo a las cámaras de 'First Dates'. Adrián trató de devolverle el 'favor' y le preguntó por su trayectoria profesional. Álvaro le contó con pelos y señales los diferentes trabajos que ha tenido, por fugaces que hayan sido. Lo que no trató detalladamente fue la temática de sus videos de TikTok.
Cuando pasaron al segundo plato, las intenciones comenzaron a verse. A Álvaro no le convenció que Adrián fuera tan tranquilo. "La personalidad de Adrián... ni sí ni no. Me gusta la gente mucho más lanzada, como sin miedo a nada, y él no compatibiliza conmigo mucho en ese aspecto", expuso. En los postres se confirmaron las sospechas.
Álvaro habló sin tapujos sobre sus experiencias íntimas: "He ido a saunas y he hecho locuras. He ido a discotecas con cuartos oscuros... Me encantan los cosas exprés". También hablaron del cruising y del contenido que el alicantino hace en TikTok. Adrián se interesó por su postura, pero confesó no pensar como él, al menos, de momento. "No me veo tan abierto como él y no sé si llegaré a ese punto", confesó. Pese a esto, el técnico de laboratorio estaba dispuesto a probar alguna experiencia algo más arriesgada. Fue Álvaro el que dio por zanjada esta relación tras solo una cita. Una relación exprés.