Desde que Telecinco hizo público el regreso definitivo de 'Gran Hermano' todo el mundo hablaba de lo mismo. ¿Quiénes serían los afortunados que cruzarían el umbral de la casa más famosa de la televisión? La de Guadalix, la que desde hace tantos años ha acogido a todo tipo de personajes que, con más pena o gloria en la trayectoria, terminaron ocupando incontables horas de pantalla. Había ganas de volver a disfrutar de la vida en directo y la productora Zeppelin abrió la convocatoria de un casting tan multitudinario como lleno de sorpresas. Basta con ver la que se llevó Maica Benedicto (25 años), una de las elegidas para concursar en el espacio.
El de la murciana, que sin lugar a dudas se ha convertido en una de las grandes protagonistas de la decimonovena temporada del formato, es uno de esos casos en los que la magia de la pequeña pantalla cobra sentido. Todo porque, a diferencia de otros tantos compañeros de convivencia que sí habían podido prepararse a conciencia para el desafío, ella no estaba al corriente de lo que se le venía encima. Y es que si bien si se presentó para entrar en 'GH' y fue pasando los filtros de la producción, a escasos días del estreno le comunicarían que no había sido seleccionada.
Una información falsa para mantenerla en vilo hasta el último momento que, evidentemente, cayó como un jarro de agua fría a esta hipocondriaca visitadora médica. No sabía, claro está, que dos días antes del inicio del programa le harían saber que sí era una de las elegidas. Y de qué manera. En medio del FesTVal de Vitoria-Gasteiz, pensando que estaba allí para trabajar de azafata en la presentación de la edición, Jorge Javier Vázquez (54 años) le revelaba la realidad. Un 'shock' absoluto que ya dejó entrever gran parte de su carismática personalidad. Esa que ha causado sensación dentro y fuera de la casa, pero que bebe también de su pasado. En la vida... Y en el amor.
El entorno de su exnovio apunta a un pasado amoroso 'difícil'
Porque como cualquier joven de 25 años, Maica, que ahora se define soltera, ha tenido mucho tiempo para pasarlo bien y vivir sus amoríos antes de poner un pie en Guadalix. Precisamente en la casa de 'Gran Hermano' ha sido muy clara en reiteradas ocasiones acerca de su forma de vivir las relaciones. Todo a raíz de que otro de los participantes, Adrián Creus (26 años), le confesase desde primera hora que tenía sentimientos por ella. Un acercamiento que al principio se tomó con humor, pero con el paso de las semanas recibió de peor gana. Hasta el punto de, a pesar de mantener las formas, dejarle claro a su compañero de concurso que ella prefiere ir poco a poco en el terreno sentimental.
Una forma de proceder lícita, siempre partiendo ella de que se considera "mujer de alto valor" y no está dispuesta a entregarse al primero que le regale los oídos. Sea como fuere, la contundencia y el convencimiento a la hora de frenar el idilio con Adrián lleva semanas siendo tema recurrente de la crónica televisiva. Hasta el punto de salir a la luz su desconocido pasado amoroso en el pódcast 'En todas las salsas' de la plataforma Mtmad. Fue a principios de este mismo mes de octubre cuando el espacio presentado por Iban García se hizo eco de la tensión que existe entre ella y "un exnovio suyo de Murcia", con el que "acabó fatal".
Así se lo hicieron llegar personas del entorno de la antigua pareja de la 'gran hermana' al periodista Pedro Jota, que también recibió la información de que los allegados del chico aseguran "que se aprovechaba mucho de él" y que "a lo mejor Maica no es lo que se muestra dentro de la casa". Una revisión retrospectiva cuando menos sorprendente que invito al comunicador, también murciano, a ponerse en contacto con el círculo de amistades de la de Cartagena. "Me dicen que esa relación acabó fatal, pero más por parte del exnovio, que por cierto ahora va a casarse, y que la parte del exnovio está intentando hacerle la vida imposible a Maica", expuso, haciéndose eco de esta contradictoria situación.
Su amor imposible con el boxeador Adrián y una revolución en Italia
En cualquier caso, y obviando estas historias del pasado que no ha sacado a relucir durante el tiempo que lleva encerrada en Guadalix, si algo parecía tener Maica grabado a fuego desde el principio es que no estaba allí para 'hacer carpeta' a la primera de cambio. Para muestra, el modo en el que puso los puntos sobre las íes a Adrián, boxeador de profesión, cuando comenzó a sentirse abrumada por el excesivo interés que él mostraba por ella. Una narrativa de ilusión que todavía persiste, aunque como bien le recordó la murciana al deportista en una de las últimas emisiones "ya se ha hablado muchas veces".
Y es que por mucho que el catalán afincado en Madrid se repita con frecuencia que no va a seguir intentándolo con Maica, se mostró muy decepcionado tras escuchar las palabras que la chica que tanto le gusta le dedicó desde Italia. Sí, desde Italia, puesto que ella fue la elegida para participar en el breve intercambio con 'Grande Fratello'. Unos días en el extranjero en los que, sorprendentemente, sí se le han llegado a despertar mariposas en el estómago. El culpable: Tommaso Franchi.
Este apuesto joven de 24 años que actualmente participa en la versión italiana de 'Gran Hermano' -y con el que no ha habido más que gestos de cariño y conversaciones amistosas- sí le interesó. Y eso que ni siquiera pudieron despedirse en persona tras el abrupto retorno a Madrid de Maica. No se dieron un último abrazo tras unas jornadas de máxima intensidad y ella confesó haberse quedado tocada. La viva prueba de que, aunque con Adrián no fluya y con su exnovio no terminase de la mejor manera, su corazón sigue abierto a la posibilidad de enamorarse.