Ni Eva Longoria, ni Cate Blanchett, Hiba Abouk o Ester Expósito. Si hay una invitada que nos ha dejado con la boca abierta en el Festival de Cannes ha sido Raquel Bollo (48 años). ¡Como lo lees! La diseñadora y colaboradora de televisión viajaba a Niza este fin de semana para disfrutar de una de las grandes fiestas del cine internacional. Y como la ocasión así lo requería ha derrochado estilo con un impresionante vestido metalizado.
Aunque es cierto que no ha paseado por la alfombra roja de la Croisette, su carrera incipiente como influencer y diseñadora le ha permitido vivir la aventura desde muy cerca. Raquel deslumbraba con un diseño de gala con estampado geométrico del modisto español Iván Campana que destaca por el llamativo volante del escote y una enorme cola que la andaluza ha defendido a la perfección.
Se trata de un diseño metalizado que se ajusta en el cuerpo dando paso a una falda voluminosa, perfecto para deslumbrar sobre la alfombra roja. "Estoy cumpliendo un sueño, no puedo creer que esté en Cannes", escribía Raquel Bollo en redes sociales sin poder contener la emoción que le suponía estar tan cerca de estrellas de Hollywood.
Raquel completaba su look de fiesta con un recogido pulido con raya al lado que dejaba al descubierto todo su rostro, perfectamente maquillado para la ocasión con un elegante ahumado en los ojos y labios nude.
Alma Bollo acompaña a su madre al Festival de Cannes
Raquel Bollo no ha vivido esta experiencia sola. La diseñadora viajaba junto a su hija Alma Bollo, lo que hacía la aventura más especial si cabe. "Soñando despierta en Cannes", escribía la joven junto a un vídeo en el que desvelaba el look que había escogido ella para la ocasión. A diferencia de su madre, Alma optaba por un sencillo vestido satinado de color negro y pronunciado escote con el que ha presumido de su ya incipiente barriguita de embarazada.
El segundo look de Raquel Bollo en el Festival de Cannes
Apasionada de la moda flamenca, Raquel Bollo no se podía ir del Festival de Cannes sin dejar un poco de sus raíces allí. La diseñadora era una de las invitadas a la fiesta de Vanity Fair y para ella recurrió a un look más cómodo y fresco aunque igual de sensacional.
La sevillana estaba preciosa con un dos piezas de gasa semitransparente con un favorecedor estampado de lunares en color negro. El estilismo, que le iba como anillo al dedo, estaba compuesto por un pantalón palazzo y una larga capa con mangas abullonadas y flor XXL a modo de broche. Un look muy veraniego que contaba con ese toque sensual al dejar la ropa interior al descubierto.
Aunque su estancia en Cannes ha sido fugaz, Raquel Bollo vuelve a casa todavía sin creer lo que su papel como creadora de contenido le está permitiendo vivir. "Lo pasamos genial. Una noche muy top", destacaba.
Los planes no cesan. Después de cumplir este sueño rodeada de estrellas de Hollywood, tal y como ella misma ha confesado retomará el Camino del Rocío junto a su grupo de amigas, algo que ya se ha convertido en tradición para ella.