Aprende a usar tu energía femenina para empoderarte y equilibrar tu bienestar interior

La energía femenina va mucho más allá de los arquetipos de géneros. Es un término holístico, una fuente de energía presente en todos nosotros que puede ayudarnos a vivir de forma más consciente y equilibrada.

Celia Pérez León

Periodista especializa en lifestyle y cultura

Actualizado a 8 de octubre de 2024, 08:00

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En el ámbito del bienestar holístico y la astrología, las palabras “energía femenina” no tiene nada que ver con la perspectiva de género ni los arquetipos sexuales. Esta energía va mucho más allá, es una fuerza creativa y receptiva que reside en todos, independientemente del género.

Los expertos afirman que esta energía está asociada a la intuición, la creatividad, el autocuidado y la empatía, cualidades que pueden ser claves para mantener un equilibrio emocional y espiritual. Es por eso que aprender a conectar con tu energía femenina, sea cual sea tu género, puede cambiar tu vida, tus relaciones y tu bienestar de forma trascendental.

¿Qué es la energía femenina?

Desde un punto de vista astrológico y holístico, la energía femenina representa cualidades como la intuición, la receptividad y la creatividad. Aspectos que, a menudo, se pasan por alto en un mundo en el que prioriza la lógica, la acción y lo masculino. Esta fuerza energética nos invita a reflexionar, escuchar de forma activa y conectar contigo misma y con los demás.

Algunas de sus características esenciales, para que puedas entender mejor a que me refiero con todo esto de la energía femenina, son las siguientes:

  • Intuición. La capacidad de entender sin recurrir a la razón lógica es una de las características más poderosas de la energía femenina. La intuición nos permite percibir lo que sucede a nuestro alrededor de forma sutil, conectándonos con nuestras emociones y con las de los demás. En la astrología, la Luna es el arquetipo que más se relaciona con este aspecto, ya que gobierna el mundo emocional y nutre nuestra capacidad de sentir.
  • Receptividad. La energía femenina no solo es introspectiva, sino también receptiva. Esta apertura al entorno y a las experiencias es crucial para establecer conexiones profundas y significativas, tanto con otras personas como con nuestro propio interior. La receptividad nos permite recibir amor, apoyo y sabiduría de los demás, elementos que son cruciales para el crecimiento personal.
  • Creatividad. Otra de las cualidades esenciales de la energía femenina es la capacidad de gestar ideas y proyectos. Esta creatividad no se limita a las artes, sino que se manifiesta en la vida diaria, en la capacidad de resolver problemas, de cuidar de nuestros seres queridos y de emprender nuevas acciones que mejoren nuestra realidad.

Aunque la energía femenina puede ser muy positiva y es fundamental cultivarla en la vida diaria, un desequilibrio en la misma con su contraparte, la energía masculina, puede llevar a tener problemas como la procrastinación, la sobrecarga emocional y la dificultad para establecer límites saludables. Pero esto te lo explico con más detalle a continuación.

Dualidad: ¿cómo se equilibra la energía femenina con la masculina?

Desde un punto de vista oriental, las energías femeninas y masculinas quedan perfectamente representadas en el símbolo del yin y el yang. Dos fuerzas opuestas, pero que no pueden existir sin la contraria, y que tiran con fuerza del individuo hasta equilibrarlo.

Como ya sabes, un exceso de energía femenina, así como su defecto, puede causar problemas en tu vida emocional e incluso física. La mejor forma de equilibrar esta energía es cultivando, a la vez, la energía masculina. Es decir, la lógica, la acción, la competitividad.

Equilibrar estas energías permite una vida más armónica y completa. Un exceso de energía masculina, por ejemplo, puede llevar a la desconexión emocional y el agotamiento, ya que se prioriza el “hacer” sobre el “ser”. Por otro lado, un exceso de energía femenina sin equilibrar puede resultar en pasividad y en la dificultad para actuar y tomar decisiones.

En la astrología, este equilibrio se refleja a través de los arquetipos de la Luna y el Sol. La Luna, relacionada con la energía femenina, es receptiva, mientras que el Sol, asociado a la energía masculina, representa el propósito y la acción. Es crucial integrar ambas energías para vivir una vida plena, nutritiva y llena de propósito.

La energía femenina en la astrología

Uno de los planos desde los que más se estudia la energía femenina es el astrológico. En este sentido, la energía femenina se manifiesta por medio de arquetipos, siendo los más conocidos la Luna y Venus.

En la astrología, la Luna simboliza la conexión emocional, la maternidad y el cuidado, mientras que Venus está relacionada con la sensualidad, el disfrute y la capacidad de atraer y recibir.

Además, en la astrología moderna se trabaja con asteroides y planetas enanos, que representan diversas expresiones de lo femenino, como Lilith, Ceres y Juno, cada uno de ellos con un profundo significado relacionado con los comportamientos y los deseos femeninos.

Estos arquetipos, sin embargo, no son solo relevantes para las mujeres, sino que pueden ser utilizados por los hombres para equilibrar sus emociones y conectar con su lado receptivo y compasivo.

Es importante, además, no solo equilibrar la energía masculina con la femenina, sino en esta última, poner en armonía los equilibrios. No existe Luna sin Venus, ni Venus sin Luna. No podemos ser solo madre o solo amante. Debe ser capaces de integrar ambas energías en nuestra vida: la que ofrece y la que recibe.

Practicar para potenciar la energía femenina

Ahora que ya sabes qué es la energía femenina y cuál es su importancia en tu bienestar emocional, es hora de aprender cómo conectar con esta fuerza holística. Porque no se trata solo de un cambio de mentalidad. Conectar con la energía femenina requiere de prácticas concretas que nos ayuden a mantener este equilibrio en la vida diaria. A continuación, te dejamos algunas actividades que pueden potenciar esta energía y contribuir con tu bienestar.

  • Meditación y mindfulness. Estas prácticas fomentan la introspección y te ayudan a conectar con tu lado intuitivo y emocional. La meditación te ayudará a desarrollar una mayor conciencia de tu mundo interior, lo cual facilitará mucho la reconexión con la energía femenina.
  • Yoga suave. El yoga suave, o particularmente el famoso yin yoga, se centra en la receptividad y la relajación. Es por eso que es una herramienta muy eficaz para conectar con la energía femenina. Estos ejercicios permiten un flujo de energía más armónico, ayudándonos a escuchar mejor a nuestro cuerpo.
  • Naturaleza. La naturaleza es una poderosa fuente de energía femenina. Dedicar tiempo a actividades al aire libre, como caminar por el bosque o cuidar de un jardín, revitaliza tu conexión con la tierra y los ciclos naturales, fomentando la receptividad y la creatividad,
  • Círculos de mujeres. Si eres mujer, participar en grupos de apoyo emocional o círculos de mujeres puede ser una forma muy efectiva de nutrir esta energía. Estos espacios ofrecen una oportunidad para compartir, escuchar y conectar emocionalmente con otras personas, fortaleciendo la empatía y el autocuidado.
  • Creatividad. La expresión artística y creatividad, por medio del dibujo, la música, la escritura o cualquiera de sus formas, permite que la energía fluya libremente. Estas actividades son una forma de honrar nuestra capacidad para crear y nutrir, ya que no solo producimos cosas tangibles, sino también experiencias emocionales más profundas.
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