Cuando la reina Letizia se sentó en la grada del pabellón de deportes del Santiago Martín Arena, en Santa Cruz de Tenerife, fue todo una sorpresa. A pesar de que la presencia de la monarca en la Copa del Mundo de Baloncesto Femenino FIBA 2018 que enfrentó a España y Bélgica estaba confirmada desde la semana pasada, lo que nadie se imaginaba es que la reina se sentara en la grada y no en el palco.
Los usuarios de Twitter y los compañeros de grada fueron los primeros en percatarse de que la reina Letizia estaba sentada, junto con su equipo de seguridad, entre el resto de aficionados. Hasta entrada la segunda parte del encuentro las cámaras de televisión no enfocaron a la reina que quiso ser testigo del bronce de España. "He llegado cuando he podido", señaló la soberana cuando finalizó en encuentro.
Vestida para apoyar a la selección femenina con un conjunto compuesto por una blusa blanca de Hugo Boss y unos pantalones rojos de Roberto Torretta, finalizado el encuentro la soberana concedió unas declaraciones a Teledeporte. “Estas jugadoras tienen espíritu de campeonas”, resaltaba uno de los usuarios de Twitter.