No gana para disgustos. Frank Cuesta (53 años) lleva casi dos décadas luchando contra el cáncer, ha tenido uno de sus años más convulsos con idas y vueltas con su ex Yuyee y hace poco más de un mes era detenido por presunta tenencia ilícita de determinadas especies en su santuario.
Lejos de las tradiciones de Semana Santa, en Tailandia era un día normal este viernes, 18 de abril. Una moto se acercó para advertir al herpetólogo que había una cobra cerca y cuando se acercó para sacarla de allí, recibió el impacto de su veneno. No sabía que se trataba de una escupidora.
Ingresado de urgencia en el hospital, los médicos han "alucinado" literalmente con su resistencia a ese veneno, tal y como ha contado su novia Paloma Ramón en la actualización de su estado de salud. No se ha separado de él en estos días. El leonés podría haber muerto y las consecuencias podrían ser fatales, ya que le ha afectado directamente a los ojos.
Días de preocupación por el estado de salud de Frank Cuesta tras la picadura de una cobra escupidora
"Estamos en urgencias, en el hospital. Resulta que ha pasado una moto por fuera del santuario y nos ha avisado de que había una cobra. Frank ha salido para sacarla de allí, de donde estaba y no sabía que era una escupidora y le ha escupido en los ojos", compartía la novia de Frank Cuesta, Paloma Ramón.
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Era ella también quien explicaba, muy preocupada, que se le había extendido el dolor por gran parte de la cara. "Podría perder los ojos o, incluso, la vida", decía en el vídeo antes de saber cómo evolucionaba su chico, que ha sorprendido a sus médicos por la resistencia al veneno después del ataque de la serpiente.
Frank Cuesta, fuera de peligro en Tailandia
Ya este fin de semana, Paloma Ramón transmitía en redes sociales que había mejorado el pronóstico: "Está bien dentro de lo que cabe, dentro de lo que se le permite. Está estable, fuera de riesgo, ya le han subido a planta y calculamos que en una semanita o dos estará ya en condiciones".
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La novia del herpetólogo destacaba que "lo que es alucinante" es que los médicos que están tratando a su chico. "Están alucinando con la resistencia que tiene Frank al veneno y es que la cobra escupidora te escupe el veneno en los ojos y no solo es que puedan perderlos, sino que a través del lacrimal se va bajando a través de los conductos respiratorios por nariz, boca, tráquea y pulmón", explicaba.
"No es la primera vez que una serpiente así ataca a Frank", recordaba también su amigo Javi Oliveira, que ha suscrito las palabras de Paloma al decir que "a una persona normal la mata". "En el 2000 estuve en coma por una mordedura de una cobra y el compañero que venía conmigo murió", contaba el naturalista a Jordi Wild en una entrevista.
Uno de los peores años para Frank Cuesta
Frank Cuesta está atravesando uno de los peores años de su vida. Hace poco más de un mes conocíamos que era detenido por las autoridades tailandesas por presunta tenencia ilícita de determinadas especies en su santuario.
Él mismo reconocía que podía haber cometido una infracción al desconocer el cambio en la legislación y asumía que podía acarrearle consecuencias penales después de ser informado de la normativa en vigor en cuanto a la posesión de especies protegidas en Tailandia.
El sábado, 1 de marzo, era puesto en libertad bajo fianza en el país asiático, pero se mostraba preocupado por lo que pudiera ocurrir: "Estoy jodido, pero hay que seguir". "El tema de los animales me duele muchísimo y ver a mis hijos como están. Mi vida son mis animales y mis hijos, porque el resto es aleatorio y esto es por lo que he luchado", decía tras lo sucedido el herpetólogo.
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Sus problemas con su ex Yuyee, el tratamiento contra el cáncer, la detención y ahora este ataque de una cobra escupidora. Son tiempos difíciles para el naturalista, que tras su detención avisaba: "Han sido días duros y van a venir días muy duros. Seguramente no es la última vez que termino en un calabozo, incluso peor, porque esto es algo que está pensado y programado para destrozarme".
Cuesta ha estado al borde de la muerte esta última semana, pero las noticias que llegan desde el hospital son esperanzadoras y tanto su novia Paloma como su amigo Javi han trasladado a sus seguidores palabras tranquilizadoras, al tiempo que ponían el acento en la fortaleza del leonés.