La última decisión del tribunal sobre la mujer que secuestró a un bebé en el Hospital de Vizcaya

La acusada había secuestrado el bebé para suplantar su aborto y evitar que sus familiares y amigos conocieran la noticia del incidente.

Alicia Alarcón
Alicia Alarcón

Redactora digital de Lecturas

Bebé recién nacido
CANVA

Hace dos años que una mujer se colaba con vestimenta de enfermera en el Hospital de Basurto y se llevaba un recién nacido. La acusada se enfrentaba desde entonces a una pena de hasta 7 años de prisión solicitada por los padres del bebé. Aun así, el Ministerio Público ha rebajado su condena tras aplicarle la agravante de víctima vulnerable por atenuantes psíquicos y de reparación del daño tras devolver el bebé en menos de tres días. Ahora, la Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) ha confirmado su condena de dos años y ocho meses de prisión impuesta por la Audiencia de Vizcaya.

La secuestradora fue detenida en la misma localidad

Todo ocurrió el pasado 19 de octubre de 2022. Las cámaras del Hospital de Basurto interceptaron a una mujer entrando en el centro sanitario con vestimenta de enfermera a pesar de que no trabajaba allí. La mujer pasó desapercibida y terminó en la habitación donde se encontraba el menor recién nacido. Allí, la acusada utilizó la excusa de hacerle una supuesta prueba al bebé para separarlo de su madre. Poco después, el hospital se percataba de que alguien se lo había llevado. Los investigadores que dieron con la mujer tras revisar las cámaras de vigilancia pudieron esclarecer los hechos poco después. Al parecer, la acusada visitó la casa de una amiga en la que pasó una noche con el recién nacido. Afortunadamente, un día después se percató de que lo que había hecho no estaba bien.

A la mañana siguiente, la mujer abandonó al bebé en el felpudo de la entrada de un piso ubicado en el barrio de Santutxu. Quienes encontraron al bebé alertaron a las autoridades de la extraña aparición el recién nacido. Poco después, esclarecían que se trataba del menor secuestrado esa misma semana en el Hospital de Basurto. Aunque no se lamentaron daños mayores, el secuestro podría haber terminado en tragedia. La Ertzaintza detuvo a la mujer tras ser localizada. La justicia decretó libertad provisional mientras que se investigaba el suceso, aunque ella decidió ingresar voluntariamente en una unidad psiquiátrica tras reconocer los hechos.

La última decisión tomada por la Justicia cierra el caso

Tal y como ha informado ‘Europa Press’, el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha rechazado los recursos presentados por la familia del neonato y la acusada contra la sentencia del órgano jurisdiccional vizcaíno, que consideró a la procesada autora de un delito de detención ilegal de un menor de edad con la concurrencia de las atenuantes de alteración psíquica y reparación parcial del daño. Aunque la investigada ha sido condenada finalmente a dos años y ocho meses de prisión, también tiene prohibido acercarse y comunicarse al menor y a sus padres a menos de 500 metros durante cinco años. Para más inri, el tribunal también ha concluido que la acusada deberá indemnizar a la familia con 12.000 euros. Según ‘Europa Press’, la Sala Civil y Penal ha determinado también, en contra del criterio de la familia del bebé, que se mantenga la atenuante de reparación del daño causado y la absolución del delito de abandono acordada por la Audiencia vizcaína. Según el tribunal, cabe una atenuante simple cuando el condenado "hace un esfuerzo para pagar, siquiera parcialmente, los daños derivados del delito, en tanto restablece, en la medida de sus posibilidades la vigencia de la norma".

El verdadero motivo detrás del secuestro

La Audiencia Provincial de Bizkaia probó en su sentencia que la acusada habrías sufrido la pérdida de un embarazo a comienzos del año 2022. Fue tras este traumático suceso cuando planeó sustraer un bebé recién nacido para hacer creer a su entorno familiar y social que seguía embarazada. Además, la condenada también manipuló la cartilla de embarazo de otra persona para afrontar su aborto.El tribunal ha verificado estos hechos mediante la comprobación de distintos mensajes y conversaciones en las que mencionaba su próxima etapa sobre maternidad. Según las pruebas recogidas, la mujer le había comunicado a su pareja que iba a acudir al hospital para que le indujeran el parto. Poco después, llevaba a cabo el secuestro y abandonaba el Hospital de Basurto con un bebé en una bolsa alrededor de las 21:17. Ahora, la mujer que intentó demostrar su fraudulento parto deberá cumplir una condena de casi tres años en prisión.