Tragedia en Madrid: hospitalizado un menor en estado crítico tras quedar atrapado en la rejilla de una piscina

Hasta el lugar se han movilizado efectivos del cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid, Policía Local de Alcalá de Henares y sanitarios del Summa.

Alicia Alarcón
Alicia Alarcón

Redactora digital de Lecturas

Piscina
Gtres

Un menor de 13 años se encuentra en estrado crítico tras sufrir un ahogamiento el pasado miércoles en una piscina privada de Alcalá de Henares. Tal y como ha señalado un portavoz de Emergencias 112 Comunidad de Madrid, el menor fue trasladado “muy grave” al hospital La Paz, tras ser reanimado.

El adolescente se encuentra hospitalizado

El menor de 13 años estaba bañándose con normalidad en una piscina privada ubicada en la avenida Miguel de Unamuno de Alcalá cuando una de sus manos quedó atrapada en la rejilla de la depuradora. Fueron los propios vecinos de la urbanización quienes apagaron la depuradora de la piscina y sacaron al niño inconsciente del agua tras presenciar el suceso. En ese momento, llamaron a los servicios de emergencia. Hasta el lugar se desplazaron Bomberos de la Comunidad de Madrid y agentes de la Policía Local de Alcalá de Henares que encontraron al menor en parada cardiorrespiratoria. Tal y como ha señalado Guillermo Lago, supervisor de Guardia Summa 112, en ‘Alcalá Hoy’, los agentes iniciaron las labores de reanimación al menor hasta que llegaron los sanitarios del Summa 112. “A nuestra llegada se encontraban realizando maniobras de reanimación cardiopulmonar básicas tanto Policía Local como Bomberos de la Comunidad de Madrid.

Tras la reanimación avanzada por nuestros equipos hemos conseguido revertir la parada cardiorrespiratoria manteniendo el pulso”, señala Lago. El niño estuvo 8 minutos en parada cardiorrespiratoria tras ser rescatado de la piscina. Afortunadamente, los sanitarios consiguieron reanimar al pequeño y estabilizarlo. El menor fue trasladado en estado crítico en helicóptero del Summa 112 al hospital La Paz de la capital donde permanece ingresado. Los vecinos que rescataron al menor aseguran que pasó varios minutos dentro del agua y que se encontraba jugando con otros menores cuando todo sucedió. Por el momento, se desconoce si el adolescente había introducido la mano de forma intencionada en la rejilla y quedó atrapado o si se estrata de un accidente ocasionado por la fuerza de la bomba de succión de la depuradora.

Aumenta el número de ahogamientos

El número de ahogamientos en piscinas ha aumentado considerablemente con la llegada del verano, sobre todo en urbanizaciones privadas. Este tipo de incidentes son más comunes en piscinas individuales o compartidas entre vecinos donde la vigilancia es menor. Los agentes de seguridad alertan del peligro de dejar a los más pequeños solos en estos lugares, ya que un menor puede ahogarse en cuestión de segundos e incluso en aguas poco profundas. Uno de los incidentes más similares al que ha ocurrido en Alcalá de Henares sucedía hace pocas semanas. Un niño de 3 años fallecía por ahogamiento en una piscina privada en Segovia. El pequeño estaba bañándose solo cuando lo encontraron en el agua inconsciente. Hasta el lugar se desplazó una unidad medicalizada de urgencias (UME) que consiguió reanimar al pequeño. Aun así, falleció por la gravedad de su estado en el Hospital General de Segovia.

Además, otro menor de 11 años perdió la vida hace pocos días en Almería tras ahogarse en una piscina municipal. Los equipos de emergencia intentaron reanimar al adolescente durante varios minutos sin éxito. Sin duda alguna, la supervisión adulta es esencial para socorrer a los menores y actuar lo más rápido posible en caso de accidente. Los resbalones, golpes y caídas en piscinas también suponen un peligro para los más pequeños. Por ello, las recomendaciones de los profesionales son claras. Nunca hay que dejar a un menor de edad sin supervisión mientras disfruta de un baño, aunque esté acompañado de otros amigos. La vigilancia es la primera medida esencial para evitar ahogamientos o accidentes por otras causas.

De hecho, los datos recogidos sobre los últimos ahogamientos del verano señalan que la mayoría de ellos se produjo en zonas poco vigiladas o que no contaban con ningún equipo de salvamento. Varios de ellos, como es el caso del menor de 13 años, han conseguido salvarse gracias a la rápida respuesta y actuación de los presentes. Tal y como recogen las medidas de prevención y actuación en momentos como estos, lo primero que hay que hacer es alertar al servicio de emergencia sanitaria correspondiente. Después, según las indicaciones que estos proporcionen por teléfono, habrá que asistir a la víctima en la medida de lo posible y si se conocen las formas de actuación correspondientes. Gracias a los conocimientos en RCP básica, varios bañistas han sido capaces de salvar vidas.