“Enhorabuena por este espaldarazo judicial en forma de la rebaja de la condena”. Así de contundente se ha mostrado Joaquín Prat en el programa que presenta junto a Patricia Pardo, ‘Vamos a ver’ en Telecinco, tras conocer 'la buena nueva' de José Lomas, el anciano que mató a un ladrón en su vivienda. Exactamente, el Tribunal Supremo de Castilla-La Mancha ha rebajado su condena de seis años y tres meses de prisión a nueve meses y cuatro días tras el recurso de sus abogados.
Además, según el nuevo auto, al octogenario condenado por asesinato también se le reduce la indemnización que debe pagar a los familiares de la víctima, un individuo que contaba con antecedentes por robos y que a altas horas de la madrugada del 1 de agosto de 2021 entró a la casa de José con el objetivo de robarle. Cuando este le vio le pegó dos disparos con una escopeta de caza.
La sentencia también rebaja las indemnizaciones que el anciano debe pagar a padres y hermanos del fallecido
En primera instancia las indemnizaciones ordenadas por el magistrado de la Audiencia Provincial de Ciudad Real encargado del caso habían sido de 48.000 euros a cada progenitor y 19.000 a cada hermano, pero gracias a esta nueva sentencia que transforma la responsabilidad responsabilidad civil del anciano conforme a la familia de la víctima próximamente solo tendrá que abonar 20.000 y 5.000 euros a los padres del fallecido y 9.000 a sus hermanos. Se hace "en base a la falta de vinculación con el mismo y al concurrir además la conducta culpable de la víctima por su entrada ilegítima y delictiva en la finca", argumenta la sentencia.
Nunca lo había hecho antes, pero en esa ocasión pasó más miedo del que nunca tenía porque haberse acostumbrado, pues han sido muchos los años que diferentes ladrones han accedido a su finca en el monte. “Ya ni las cuento. Denuncias he puesto, posiblemente, 30 o 40. Ya me aburrí de denuncias porque no se solucionaba y ya en el año 2000 cambié puertas y ventanas. Eso es vivir enclaustrado en el campo. No tenía dinero para pagar una buena verja”, ha explicado a Prat.
"Estoy convencido de que soy inocente porque yo a ese señor no le maté"
Este miércoles, durante su intervención en directo que tan atentamente ha escuchado el presentador de Mediaset, ha explicado que siempre es de agradecer una rebaja de condena aunque él está "convencido de que soy inocente porque yo a ese señor no le maté. Soy incapaz de pegarle dos disparos a un ser humano. Disparé para asustar, no para matar. Los dos disparos que tenía ese señor yo jamás los hubiese hecho y quien le hizo eso fue un matador, yo no" ha dicho, dejando también muy claro que él respeta la vida humana y que tiene una serie de valores que le enseñaron de niño que no los ha cambiado ni los cambiará nunca.
José Lomas, además, no ha dudado en volver a detallar a la audiencia lo que aquella indeseable madrugada pasó: "No era uno solo el que había. Aquello daba sensación de ser una cuadrilla (...) Había más personas allí y yo no sabía dónde estaban, pero jamás me acerqué a la distancia suficiente como para hacer esos dos disparos. Además, jamás apunté al cuerpo, apunté a derecha y después a izquierda”, ha sentenciado con firmeza.
La sentencia todavía se puede recurrir porque disparó a cinco metros del ladrón
En cualquier caso, todavía faltan cuatro días para que la sentencia sea oficialmente firme. La Fiscalía o los abogados de la acusación todavía están a tiempo de emitir un recurso de casación. Y es que en la resolución de la Sala del TSJCLM se explica claramente que estiman parcialmente la legítima defensa por ‘error vencible’, al entender que José actuó ante una entrada delictiva de un desconocido a su finca, pero que también "la defensa que esgrimió, efectuando dos disparos a la víctima, fue desproporcionada".
Esto último, importante también importante para la Sala pese a que el recurso de los abogados del octogenario se ha resuelto claramente a favor de él, queda perfectamente detallado en la resolución. Patricia Pardo, durante su intervención, ha explicado que el condenado disparó dos veces a cinco metros del ladrón. ¿Será argumento suficiente para que la acusación recurra y esta pesadilla no termine todavía para el anciano?