Aunque los últimos y los próximos días en nuestro país están marcados por las lluvias y tormentas, el planeta se enfrenta a un grave problema de calentamiento. De hecho, las rachas de calor de los últimos meses continúan marcando récords alarmantes. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha alertado de un posible ‘infierno climático’ sin precedentes.
Catapultados hacia el 'infierno climático'
Según los nuevos datos del servicio de vigilancia climática de la Unión Europea Copernicus, el planeta ha experimentado un acontecimiento único y muy preocupante. La tierra ya ha sufrido 12 meses de calor consecutivos. Tal y como reflejan los registros del Servicio de Cambio Climático Copernicus (C3S), la temperatura media global de mayo ha superado la de 1991 a 2020 y la media preindustrial de 1850 a 1900. De hecho, este último año no ha sido el único en experimentar semejantes consecuencias en el cambio climático. Según los datos registrados de Copernicus, los meses comprendidos entre 2023 y mayo de 2024 han sido los más calurosos de la historia. Los datos que ha dado a conocer el C3S se alinean con la última Actualización Global Anual a Decenal sobre el Clima de la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Como secuencia, reflejan el peligro de acercarnos a los umbrales establecidos en el Acuerdo de París sobre el cambio climático. Tal y como ha señalado el informe, se prevé que la temperatura media global de cada año hasta 2028 sea entre 1,1ºC y 19ºC más elevada que la línea base de 1850 a 1900. Además, las estadísticas del informe revelan que existe un 80% de probabilidad de que, al menos un año hasta 2028 se supere de forma temporal en 1,5ºC.
Graves consecuencias del aumento de las temperaturas
Tal y como ha señalado la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), este verano podría ser uno de los más calurosos de la historia con valores récord. Los expertos prevén que las altas temperaturas lleguen de golpe en un momento determinado y tendrán un grave impacto en el planeta. El calor extremo y la falta de lluvias podría alimentar la creciente problemática de sequía a la que se enfrenta España y muchos otros países. Además, las altas temperaturas no solo tendrán consecuencias inminentes sobre el planeta tierra, también lo harán sobre el ecosistema. Son millones de animales y plantas las que sufren desde hace años las consecuencias de las olas de calor. Cambios en el comportamiento de las especies más resilientes, su dispersión en busca de condiciones medioambientales más adecuadas e incluso la muerte de algunos animales son algunas de ellas.
Otra de las graves consecuencias que se pone sobre la mesa nos afecta directamente a nosotros, a la población. Golpes de calor, mareos, dolor de cabeza, nauseas e incluso desmayos son algunas de ellas. De hecho, en los últimos años se ha registrado un aumento generalizado de los fallecimientos por calor extremo y condiciones adversas, especialmente entre quienes trabajan en la calle, el campo o expuestos al sol. India ha sido uno de los países con más casos de muerte por las altas temperaturas. Según el medio 'CNN', decenas de personas han perdido la vida allí durante las últimas semanas donde se han registrado picos de hasta 50ºC. Lo mismo ocurre en el continente asiático donde se ha tenido que proceder, incluso, al cierre de escuelas y otros lugares públicos. Sin duda, el límite de las temperaturas extremas pende de un hilo.
La importante necesidad de medidas urgentes
Todo señala que el constante aumento de las temperaturas se está convirtiendo do en un ciclo incesante. Según los expertos, el cinturón de calor extremo aumentará hacia a 2053 donde millones de personas vivirán bajo temperaturas de 50ºC. El director de C3S, Carlo Buontempo, asegura que “es impactante”, aunque “no sorprendente. “Si bien esta secuencia de meses récord eventualmente se verá interrumpida, la firma general del cambio climático persiste y no hay señales a la vista de un cambio en tal tendencia”, señala. Ante la preocupante situación, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha lanzado un llamamiento urgente a la acción tras destacar la grave crisis climática que enfrenta el planeta.
“Durante el año pasado, cada cambio del calendario aumentó la temperatura. Nuestro planeta está tratando de decirnos algo, pero parece que no estamos escuchando. Estamos rompiendo récords de temperatura global y cosechando el torbellino. Es el momento de la crisis climática. Ahora es el momento de movilizarnos, actuar y cumplir”, explica en un comunicado. En este sentido, Guterres ha presentado un plan para llevar a cabo reducciones de las emisiones, reformar los flujos financieros y abordar la industria de los combustibles fósiles entre otras medidas. Tal vez, si el planeta actúa a tiempo contra la problemática situación, sea posible retomar las condiciones meteorológicas habituales. De no ser así, llegará un día en el que los efectos del cambio climático sean irreversibles.