Ni a primera ni a última: esta es la mejor hora para hacer fotos en verano

Sacar el máximo partido a nuestra cámara este verano también depende de elegir el mejor momento

Pablo Casal
Pablo Casal

Coordinador digital de Lecturas

Dos personas disfrutando de un día de playa
Europa Press

Cuando llega el verano, es momento para relajarnos, tomar el sol con precaución, escaparnos a un lugar idílico en el que desconectar en compañía de los nuestros o con nosotros mismos y parece que también aumentan las ganas de hacer más fotos y compartirlas, a pesar de que nos aconsejan no caer en el exceso por los peligros que conlleva para la seguridad de nuestras casas. 

En el momento de capturar las imágenes no solo es importante el lugar, cómo queramos lucir y la postura o los gestos frente a la cámara, sino también cómo jugamos con la luz natural y en este sentido hay que elegir bien la hora para sacarle el máximo partido a nuestras improvisadas sesiones veraniegas. 

La búsqueda del momento perfecto para nuestras fotos

Son muchas las personas que nos hemos dejado llevar por las indicaciones más genéricas para elegir el momento perfecto en el que sacar la cámara y tomar fotografías, pero hay que tener en cuenta diferentes factores y no pensar que simplemente debemos atender a la primera hora, al amanecer y a última, cuando el sol desaparece ante nuestro objetivo. Está claro que ahí está el primer punto a tener en cuenta cuando nos reservamos ese espacio para las sesiones de fotos, pero hay matices importantes que los expertos también toman en consideración de cara a obtener los mejores resultados. 

Cuando la luz está suave y el sol bajo sería el resumen inicial para fijar la 'Golden Hour' a la que hacen referencia siempre los especialistas, pero la hora dorada no se da siempre en el mismo momento y por eso hay varias aplicaciones para calcular el minuto exacto, ya que estamos hablando de instantes decisivos y de ubicar nuestra oportunidad ni tan tarde ni tan temprano y la luz perfecta se puede escapar ante nosotros en un abrir y cerrar de ojos, aunque suene demasiado poético. 

Nos hemos descargado una de ellas, bajo el nombre 'Golden Hour App' y gratuita, en la que no solo nos marca esa hora, fijada en Madrid entre las 6:27 y las 7:28 por la mañana y en la noche, a las 21:08 y hasta las 22:09, pero podemos cambiar la ubicación y conocer, además, cuándo se producen otra serie de fenómenos como el crepúsculo astronómico, el civil o el náutico en las dos mitades del día, así como la hora azul, de la que hablaremos más adelante en nuestras 'curiosidades diarias' de Lecturas. 

El verano: explosión de fotografías en nuestro carrete

Con el dorado de nuestra piel tras el bronceado, la ropa que elegimos con mimo y detalle al hacer la maleta y esos lugares a los que llevamos meses esperando viajar, es lógico que apetezca más capturar momentos y si nosotros somos protagonistas en esas instantáneas, querremos salir lo mejor posible, así que este verano no caigamos en el estrés posterior, ya que los expertos consideran que si elegimos bien el enfoque, el escenario y jugamos correctamente con la luz natural podremos, incluso, renunciar a filtros y a pasar demasiado tiempo ajustando niveles en el editor. 

No se trata de pensar únicamente en la primera o última hora del día, porque ya hemos visto que tenemos que tener en cuenta nuestra ubicación, la época y el día concreto en el que vamos a disfrutar de un amanecer o atardecer idílico que queramos mantener en nuestro carrete para el recuerdo y, muchas veces, también vivimos con ilusión la posibilidad de que se haga viral entre nuestros seguidores y más allá si la compartimos en redes sociales. Por eso, este verano seguiremos compartiendo trucos y hablaremos con un experto para que nos arroje más luz, que ya hemos visto que es esencial. 

Hay otro 'tip' que nos trasladaba un fotógrafo hace tiempo e influye en cómo luce nuestra silueta precisamente con esa iluminación, así que cuando lo comprobamos pudimos ver claramente que al colocarnos a contraluz se perdía completamente la figura, al igual que al posar a esas horas del día catalogadas como 'doradas', no solo lucía la piel con mejor color sin retocar demasiado, sino que también nos veíamos mucho mejor en la pantalla al repasar las decenas de fotos que habíamos pedido. Porque, eso sí, sea la hora que sea seguiremos solicitando más para poder elegir. 

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