El bienestar físico y emocional es una de las preocupaciones más relevantes en la actualidad. Más allá del cuidado de las relaciones sociales, el interés por el bienestar propio es cada vez mayor. Así lo demuestran las búsquedas a cerca de este importante asunto y los divulgadores sobre salud. Los expertos no se equivocan. El bienestar físico es clave para disfrutar de una vida plena y, en muchos casos, depende también de las rutinas que lleva a cabo cada persona. De hecho, los hábitos que incorporamos en el día a día pueden incluso prolongar la esperanza de vida.
Algunos de los ejemplos más frecuentes que recomiendan los expertos son una alimentación saludable y una actividad física activa, pero moderada. Evitar el sedentarismo, el estrés, el tabaco o el alcohol puede ser determinante. En definitiva, estos hábitos ayudan a cuidar de nuestra microbiota. Es decir, el conjunto de microorganismos que forman nuestro organismo y colonizan el aparato digestivo entre muchos otros.
Marta León, ingeniera química y experta en salud, asegura que el equilibrio de la microbiota es esencial para gozar de una buena salud. Si el intestino no goza de una buena salud, nuestras hormonas tampoco lo harán porque todo el sistema está conectado. “La alimentación, el intestino, las hormonas, las emociones... Entenderlo es como descubrir que, a pesar de la complejidad del cuerpo, existe un hilo invisible que lo une todo”.
La gran importancia de cuidar la microbiota
María Branyas ha pasado a la historia tras convertirse en la mujer más longeva del mundo con 117 años. Expertos que han investigado la microbiota de la catalana han descubierto que tenía “un genoma privilegiado”. Aun así, su propia hija, Rosa, señalaba en ‘EFE que “ha vivido tanto porque no ha tenido ninguna enfermedad”. María siempre mantuvo una vida saludable más allá de sus virtudes genéticas. En cualquier caso, este hito ha puesto de manifiesto la importancia de cuidar de nuestra microbiota.
La experta en salud hormonal e inquiera química, Marta León, ha investigado este relevante asunto. Sus conclusiones enfocadas sobre la microbiota de las mujeres se encuentran publicadas en su libro ‘El equilibrio perfecto’. Aunque “no es fácil mantener ese equilibrio” la experta asegura que “sí que es posible cuidarlo con las herramientas adecuadas, ya que en el universo infinitesimal está el camino para comprender mejor el cuerpo y sentirse bien”.
Las claves sobre la microbiota intestinal y sus beneficios
Una de las partes más importantes de nuestro cuerpo a la vez que preocupantes para muchos es el intestino. Por este motivo, la experta ha investigado la microbiota intestinal y su impacto sobre el bienestar. “Se ha demostrado que puede influir en el sistema de reciclaje de las hormonas. Hoy en día, ya sabemos que ciertos microorganismos producen enzimas que modifican la estructura química de las hormonas sexuales femeninas y que pueden influir en su efectividad. Piensa en este pequeño universo como una ciudad bulliciosa dentro del cuerpo, llena de habitantes, cada uno con su función, que trabajan incansablemente para mantener tu bienestar”, asegura la autora.
Marta León recoge en su libro algunas de las funciones claves que hay que conocer sobre la microbiota intestinal para poder cuidarla adecuadamente. “Tiene un rol fundamental en la descomposición de los alimentos que el cuerpo no puede procesar por sí solo. Esto permite la absorción eficiente de nutrientes esenciales, de los que depende nuestra salud”, asegura. También “nuestro microuniverso intestinal influye en cómo el cuerpo almacena y utiliza la energía, lo cual ayuda a mantener un equilibrio energético óptimo y previene trastornos metabólicos”.
En el caso de las mujeres, “el equilibrio de la microbiota también está íntimamente relacionado con la salud menstrual, la fertilidad y la entrada a la menopausia”. “Al mismo tiempo, las hormonas que regulan el ciclo menstrual también están influenciadas por la salud intestinal. Este círculo virtuoso nos recuerda que en nuestro organismo todo está conectado y que un desequilibrio puede llevarnos a otro, y a otro, y a otro…”, cuenta la ingeniera química.
Por todos estos motivos, la experta reivindica la necesidad de cuidar de la microbiota. “Proporcionarle al cuerpo la materia prima necesaria para que pueda construir salud es el primer paso hacia este equilibrio, y la mejor manera es hacerlo con la alimentación, sentencia. El consumo de probióticos, pequeños organismos vivos, es clave para el buen mantenimiento de la microbiota. Sin un organismo saludable, no puede haber una vida plena.