La confesión de José Bretón mantiene en vilo a todo el país. Más de una década después de ser condenado, ha reconocido los hechos y ha explicado cómo terminó con la vida de sus hijos de 2 y 5 años. La reacción de la opinión pública es más que evidente. Las redes sociales no han tardado en llenarse de comentarios de odio contra el condenado. También varios expertos y periodistas han cargado contra esta sorprendente e inesperada decisión de José Bretón. José Cabrera, psiquiatra forense, ha analizado sus polémicas palabras.
José Cabrera, sobre la insólita confesión de Bretón
José Cabrera no ha dudado ni un instante en cuestionar la confesión del condenado cuando ha sido preguntado en ‘Antena3’. “Ni yo ni nadie en este mundo puede creerse la sinceridad, entre comillas, de este hombre. Como en su día, nadie nos creímos lo que decía, pero claro la sinceridad es un tema que está al albur de la ley. Es decir, el sujeto que está imputado puede mentir y puede decir lo que quiera para defenderse, pero lo que hoy ha hecho este hombre en realidad nos ha causado estupor porque simplemente quiere lavar un poco su imagen y tratar de conseguir algún beneficio”, cuenta en el citado medio.
Cabrera, experto en casos como este, también ha puesto en duda su capacidad de arrepentimiento. “Este individuo no tiene. Como se ha demostrado en estos 14 años es, a mi juicio, nula”, añade. El experto es psicología forense también ha abordado uno de los asuntos más importantes que ya se investigaron hace 14 años, pero que sigue generando dudas en la actualidad. “No hay ningún trastorno mental, es otra cosa que hay que dejar clara”, asegura.
El verdadero motivo de su confesión, según José Cabrera
José Bretón señalaba en su confesión que cometió el crimen odio. Al parecer, no soportaba la idea de que sus hijos tuvieran que pasar tiempo con la familia de su exmujer. “Me obsesionaba la idea de que se educaran al lado de la familia de mi mujer, que a mí me parecía una familia tóxica. Yo me había alejado mucho de ellos, solo veía problemas allí dentro. Me deprimía la idea de que mi hija Ruth y mi hijo José crecieran entre ellos sin estar yo delante. Ahí fue cuando empecé a volverme loco”, asegura el asesino en su entrevista con Luisgé Martín.
Sin embargo, el psiquiatra forense asegura que este no es el verdadero motivo de su confesión 14 años después de cometer el crimen. “Yo apunto a que quiere conseguir algún beneficio, porque lavar su imagen es imposible con lo que ha hecho”, explica. De hecho, es otra posibilidad que su propio abogado ha puesto sobre la mesa.
“Tratando de beneficiarse de unos permisos penitenciarios”, cuenta Baldomero Sánchez de Puerta en el mismo medio. Al parecer, la llegada de su confesión podría ser fruto de una estrategia ideada para obtener ciertos beneficios. “¿Qu�� es lo que hay detrás de este aparente buen rollo? Pues tal vez hacer un libro o una serie. Hasta motivos económicos podrían haber, en mi opinión”, relata.
José Bretón no padece ningún trastorno mental
José Cabrera también ha destacado que “su conciencia, entre comillas, es inexistente porque el sujeto se mantuvo en el juicio y que levante la mayo quien le creyó en su día y el que el cree ahora”. El experto está seguro de que miente y no existe arrepintiendo alguno. “Yo soy psiquiatra forense, llevo mi vida entera dedicada a este tipo de personaje y su palabra no vale ni medio segundo de nuestra reflexión. Lo que ocurre es que esto causa impacto”, añade. Si el experto está en lo cierto, José Bretón fue totalmente consiente de las consecuencias de sus actos.
“La gente pensará que detrás de este hombre tiene que haber un trastorno psiquiátrico. Quiero decirles a los ciudadanos que nos están viendo que, detrás de estos crímenes, casi nunca hay un diagnóstico psiquiátrico. Lo que ocurre es que hay malas conciencias, personas malvadas y sujetos con una afectividad mínimas. También personas con mucho odio. En fin, los pecados capitales están encima de la mesa”, relata. Por todos estos motivos, ha llegado a una conclusión.
“Yo como psiquiatra forense en este asunto quisiera dejar claro que hay que buscar a este tipo de sujetos sin ningún filtro médico. Es decir, ellos actuaron como actuaron por odio, venganza, celos y las cuestiones de siempre. Este es el asunto”, sentencia. Más allá de sus palabras 14 después de cometer el crimen, José Bretón drogó con somníferos a sus hijos menores de edad a conciencia para luego quemarlos sin miramientos. Esta es la realidad que se sitúa tras el crimen que el mismo ha reconocido.
