La investigación del accidente de avión este miércoles, 25 de diciembre, en la ciudad kazaja de Aktau podría dar un giro tras las últimas informaciones que han trascendido. En un primer momento, se apuntaba al choque con una bandada de pájaros que podría haber obligado al piloto a cambiar el rumbo después de una primera modificación en la ruta por la niebla. Ahora, unos agujeros en el fuselaje del Embraer 190 de Azerbaijan Airlines han hecho sospechar sobre un posible ataque aéreo, según el Consejo de Seguridad y Defensa de Ucrania.
Tras el aterrizaje forzoso del vuelo J2-8243 a 3 kilómetros de la pista de aterrizaje a orillas del Mar Caspio, también se hablaba de la explosión de un balón de oxígeno en el interior de la nave, en la que viajaban 68 pasajeros, de las cuales 38 personas fallecían tras el impacto y 32 supervivientes eran hospitalizados, 11 de ellos en estado crítico, tal y como señalan el diario '20 minutos' y 'CNN Mundo'. Las cifras todavía son confusas y continúan las pesquisas para esclarecer cómo se produjo el siniestro.
La investigación del accidente de avión en Kazajistán
Las autoridades de Kazajistán y la aerolínea propietaria de la nave siniestrada en el país, Azerbaiyán Airlines, continúan investigando las causas que ocasionaron el accidente aéreo que dejaba 38 fallecidos y alrededor de 30 supervivientes, ya que las cifras todavía son confusas, así como el origen de la catástrofe. A las 8:35 de la mañana, hora local, llegarían las señales de socorro desde el Embraer 190, que se dirigía desde Bakú, la capital azerbaiyana, a la localidad de Grozni, en Rusia.
El vuelo J2-8243 modificó, según las primeras informaciones, la ruta hasta en dos ocasiones. En un primer momento, la niebla habría obligado a un primer cambio y posteriormente el piloto habría decidido aterrizar en el aeropuerto de la ciudad kazaja de Aktau tras chocar con una bandada de pájaros. Finalmente, el avión se estrellaba a unos 3 kilómetros de la pista de aterrizaje, situada a orillas del Mar Caspio.
"Los cuerpos están en mal estado, la mayoría quemados, todos recogidos. Ahora están en la morgue y se procederá a su identificación", explicaba el viceprimer ministro de Kazajistán, Kanat Bozumbayev, quien también aseguraba que hay una única superviviente de la que se desconoce su identidad, que "está inconsciente, no tiene documentos y se encuentra en el hospital".
Los agujeros en el fuselaje de la nave que han llevado a las autoridades ucranianas a sembrar la duda
El Consejo de Defensa de Ucrania apunta a un posible ataque aéreo de Rusia después de que se hayan hallado unos agujeros en el fuselaje de la nave, aunque todavía hay muchas dudas sobre lo que pudo ocasionar el siniestro del avión de Azerbaiyán Airlines este miércoles, 25 de diciembre. Habrá que esperar para esclarecer lo sucedido, mientras las autoridades de todos los países implicados en la investigación se mantienen cautos sobre lo sucedido.
"La información que me proporcionaron es que el avión cambió su rumbo entre Bakú y Grozni debido al empeoramiento de las condiciones meteorológicas y se dirigió al aeropuerto de Aktau, donde se estrelló al aterrizar", declaraba tras el accidente el presidente azerbaiyano, Ilham Aliyev, quien ha ordenado una investigación penal para saber cuáles fueron las causas reales que llevaron al avión a estrellarse en Aktau.
El Ministerio de Situaciones de Emergencia de Kazajstán asegura que al llegar al lugar del siniestro el avión estaba envuelto en llamas y los equipos de emergencia y rescate consiguieron extinguir el fuego. Una de las personas que participaron en esas labores explicaba lo que vio al acceder a la pista: "la parte delantera del avión estaba en llamas. Rescatamos a los supervivientes. Sus cuerpos estaban cubiertos de sangre. Lloraban. Todo el mundo pedía ayuda".
Además, en los vídeos se puede observar cómo el aparato volaba en círculos erráticos sobre el aeropuerto antes de que impactara contra el suelo. Un superviviente grababa, por otro lado, un vídeo desde dentro del avión en el que se pueden ver los angustiosos momentos previos y posteriores al accidente. Desde Rusia, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, pedía en el medio estatal ruso 'RIA Novosti' esperar a que se conozcan más detalles en la investigación antes de sacar conclusiones y no entrar en especulaciones tempranas.