La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura ha puesto fin al debate sobre la edad a la que dejamos de ser jóvenes. De hecho, aunque muchos piensan que la vejez se refleja en el estado de la mente, realmente no es así.
¿A qué edad termina la 'juventud'?
El aumento de la esperanza de vida, los avances médicos y algunos factores sociales han avivado el debate sobre la edad a la que una persona deja de considerarse ‘joven’. Lo cierto es que la etiqueta de edad se ha modificado con los años, pero la de los más jóvenes se mantiene intacta. Hace dos décadas que dejó de considerarse a las personas que se jubilaban como colectivo de la “tercera edad”. Según los datos recogidos de 29 países encuestados por ‘Ipsos Global Advisor’ en 2019, cada vez son más quienes deciden atrasar la edad de la vejez. En los últimos años, las encuestas populares han cifrado a la vejez los 74 años. Lo cierto es que las especulaciones sobre la vejez no distan demasiado de la realidad. Según un estudio elaborado por científicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Standford, se considera que una persona entra en la etapa de la vejez a partir de los 78 años. Es una conclusión a la que han llegado los investigadores tras descubrir que la producción de proteínas disminuye drásticamente a partir de esta edad.
Está claro que nadie quiere que le encasillen en la vejez, pero la ciencia ha dictado sentencia. De hecho, según el citado estudio de ‘Ipsos Global Advisor’, 6 de cada 10 españoles se muestran preocupados por cumplir años y envejecer. Solo el 15% de los encuestados desea llegar a la vejez. En esta misma línea, la ciencia ha concluido que la etapa de la vejez avanzada comienza a partir de los 90 años, mientras que la madurez tardía termina a los 77 y la de los adultos a los 60. Aun así, el mayor debate de opiniones se sitúa sobre la juventud. Según la UNESCO, aquellas personas comprendidas entre los 10 y los 24 años todavía son jóvenes. El resto de los menores integrados entre los 0 a los 9 años se ubican en la etapa de la infancia. Es la conclusión a la que han llegado los expertos de la organización según los criterios del libro ‘La salud de los jóvenes: un desafío para la sociedad”. Es decir, el número de personas jóvenes en el mundo representa el 16% de la población con 1.200 millones aproximadamente, tal y como sostiene la Organización de las Naciones Unidas.
Aun así, según los expertos, los jóvenes no constituyen un grupo homogéneo. “Las diferencias culturales, de género y socioeconómicas determinan en qué grado las personas jóvenes son sucesibles al riesgo social y definen su vulnerabilidad”, sostiene el escrito ‘Decenio de las Naciones Unidas para la Alfabetización’. La UNESCO señala la importancia de cuidar a la población más joven para que no pierdan sus aspiraciones y potencial, ya que “corren el riesgo de renunciar definitivamente a la posibilidad de comprometerse plenamente en la vida”. “Es preciso potenciar el papel de los jóvenes con el fin de que su evolución desde la infancia hasta la adultez se convierta en personas responsables y comprometidas”, señala. Aunque la juventud tal y como se conoce tienen fecha límite, los expertos señalan que adoptar hábitos saludables de autocuidado de forma temprana puede mantener nuestra mente en la etapa pese a ser considerados adultos o ancianos.
¿Qué se entiende por adolescencia?
Unicef también tiene la respuesta a muchas de las dudas que surgen sobre el complejo concepto de la adolescencia. Lo cierto es que, según la Convención sobre los Derechos del Niño celebrada en 1989, son niños todas aquellas personas comprendidas entre los 10 y los 17 años. Pese a ello, de forma simultánea también son adolescentes. Sin embargo, dejan de pertenecer a la niñez a los 18 o 19 años, aunque todavía se mantienen en la adolescencia. Pese a que no existe un único consenso sobre los límites de la adolescencia, estas son las edades en las que coinciden la mayor parte de instituciones y profesionales.
Sind duda alguna, la adolescencia es una de las fases más complicadas de la vida. De hecho, la propia adolescencia afronta distintas etapas. La primera de ellas es la conocida como temprana o inicial que comienza a los 10 años y termina a los 13 de forma general. En algunos casos, los expertos aseguran que se puede extender hasta los 14 o 15 años. La segunda de las etapas es la 'adolescencia media' que se inicia de forma general a los 14 años y termina a los 15 o 16. En casos excepcionales, también se extiende hasta los 18 o 20 años. La tercera y última de las etapas es la conocida como ‘adolescencia tardía’ o ‘post-adolescencia’ que comienza a los 18 o 20 años y finaliza a los 24. Aunque estos son los criterios que establece la ciencia y la mayoría de las instituciones de forma general, es cierto que en muchos casos depende de los procesos de maduración biológica.