Dos años en coma por beberse un batido de proteínas: el desgarrador testimonio de la madre de Marta

Su vida cambió de un día para otro: sus entrenadores le aseguraron que no llevaba pistacho la bebida deportiva que le recomendaron. Desde entonces, su madre lucha por su recuperación pese a las muchas trabas que se ha encontrado por el camino

Enrique Espada
Enrique Espada

Periodista especializado en actualidad

Y ahora sonsoles
Y ahora Sonsoles

Dos duros años han pasado desde que en septiembre de 2022 la vida de Marta y toda su familia diera un vuelco radical. La joven, de solo 19 años entonces, sufrió un inesperado choque anafiláctico por beber un aparentemente inofensivo batido de proteínas que estaba compuesto en parte por frutos secos. Ella era alérgica. 

Varios sorbos después, la joven de Alcoy, Valencia, fue trasladada rápidamente desde el gimnasio en el que se encontraba al único hospital público del municipio pero del que salió a las pocas horas. Para su madre, en esta falta de atención está la supuesta negligencia médica por la que ahora Marta lleva algo más de un año y medio en coma. Esto y que los trabajadores del gimnasio le aseguraran a su hija que el batido no llevaba pistacho, cuando sí que era uno de los ingredientes principales y del que Marta sabía perfectamente que era altamente alérgica. Lo preguntó y repreguntó.

En la pública solo la sedaban

Pero ahora eso es lo que menos le importa a María Verdejo, la madre de la joven en coma. Porque, además, la mala experiencia en la sanidad pública todavía ha hecho más insufrible la situación. "El diagnóstico de los médicos era que nuestra hija se apagaba, que no tenía posibilidades de sobrevivir. La tuvieron sufriendo con muchas dosis de sedación que no hacían más que empeorar su estado."

María lo vio claro. Tenía que llevarse a su hija fuera de allí, a otro sitio más especializado donde trabajasen realmente por la verdadera recuperación de su hija -ahora con 21 años-. Pero, al menos, aquí sí que hizo algo bueno el hospital público de Alcoy: les ofreció un permiso para poder acceder de manera gratuita al caro tratamiento de una de las mejores clínicas especializadas en neurorehabilitación de Valencia aunque solo por un breve plazo de dos meses.

Todo cambió con el traslado de la joven a una clínica privada

Para sorpresa de todos, y seguramente un milagro para quien sea creyente, Marta comenzó a presentar signos de mejoría. Y a esto se agarró la madre de una familia de pocos recursos para alargar el tratamiento de su hija en esta clínica privada subvencionado por la Seguridad Social, que tras mucho pelear consiguió.  "La evolución desde que llegamos es sorprendente", aseguró María entonces sobre la rápida evolución de su hija en este centro.

Cada día era una pequeña esperanza más. La mejoría se notaba en pequeñas acciones que comenzaba a realizar la joven por sí misma o incluso a farfullar algunas palabras. Pero casi dos años después la familia necesitaba que la progresión de la joven fuera más rápida, para evitar que Marta no pasara toda su juventud encamada. Y así dieron el siguiente paso, aunque no pequeño: en México tienen un novedoso tratamiento de células madre “que puede ayudar a mejorar sus conexiones neuronales", explica su madre para ‘El periódico’.

Un avanzado tratamiento de México es su esperanza 

Así que allí se fueron después de solventar la traba de la cuestión económica. Gracias a la campaña www.ayudamarta.com puesta en marcha por la familia, rápidamente muchas almas solidarias de diferentes puntos de España decidieron aportar los donativos suficientes para que madre e hija ‘saltaran el charco’ y consiguieran lo que hoy ya es una realidad. Desde que regresaron de México las mejoras han sido evidentes. "Desde hace unos días está mucho más despierta, más comunicativa y se la ve mucho más relajada", explica Verdejo.

Mucho más alegres que al comienzo de esta inimaginable pesadilla, la madre de Marta que recientemente también ha hecho público el denunciable caso en ‘Y ahora… Sónsoles’ no quiere dejar pasar la oportunidad para poner el foco en que "la gente está haciendo posible lo que debería hacer el sistema", pues por segunda vez han tenido que activar la campaña de ‘crowdfunding’ para poder volver al país mexicano de aquí a medio año. Es una lástima que no tengamos la posibilidad de hacer este tratamiento en España, realmente los casos como los de Marta están muy poco estudiados”, lamenta también la sufrida madre.

Es una luchadora

Una apuesta por la ciencia, mucha esperanza pero sobre todo confianza en la fortaleza de su joven hija. "La evolución de una persona que se recupera de un estado de coma es muy variable, pero confiamos que nuestra hija pueda llegar bien arriba porque después de todo nos ha demostrado que es una luchadora", espeta una progenitora que haría como la gran mayoría de madres: todo lo que humanamente posible para volver a ver a su hija haciendo una vida normal y, sobre todo, feliz.