La soledad no deseada "es una realidad que afecta profundamente el bienestar de las personas, especialmente en edades avanzadas". Así comienza a responder la directora de la 'Fundación Vivofácil', con la que hemos hablado en Lecturas para abordar un problema que, directa o indirectamente, nos involucra a todos. Hay otros colectivos damnificados, pero lo cierto es que las personas mayores son especialmente vulnerables y hay medidas a las que podemos sumarnos para luchar contra ello, con un decálogo que nos permite responder activamente. Desde romper esquemas, ser empáticos y ofrecer nuestro tiempo libre hasta el papel que adoptamos los medios de comunicación, todo suma si tenemos en cuenta esas diez buenas prácticas.
Mar Aguilera, al frente de la fundación, nos ha explicado cuál es el papel que ejercen para "ayudar a mitigar ese sentimiento de soledad" con el objetivo de ser una "red de apoyo para quienes se sienten aislados". Además, incide en ese punto de inflexión que llegó con la pandemia, cuando se acentuó ese problema que "no es solo individual", sino también social. "Seguiremos apostando por programas que fomenten este tipo de iniciativas y por difundir un mensaje de conexión, solidaridad y apoyo entre todas las generaciones", promete la directiva.
La soledad no deseada: el decálogo para combatirla
Cuando la soledad no es elegida, el problema da un paso más allá y de ello son muy conscientes en la 'Fundación Vivofácil', desde la que tienen un compromiso con la sociedad en el sentido de "ser una red de apoyo para quienes se sienten aislados/as, tanto emocional como físicamente", nos explica su directora. "Nuestro papel es ofrecer herramientas que ayuden a mitigar ese sentimiento de soledad, a través de un programa de escucha activa y acompañamiento personalizado, -telefónico y/o presencial-, que se llama 'Ilumina una vida'", responde Mar Aguilera. Además, cuentan con un "decálogo para combatir la soledad no deseada" y las acciones que podemos llevar a cabo son sencillas y pueden tener un impacto significativo a la hora de luchar contra este problema y encontrar una solución. "Tú puedes ser ese café en una tarde de invierno, ese paseo en compañía, sé ilusión", se puede leer en uno de sus mensajes de llamada a la acción.
"Romper nuestros esquemas, mirar a nuestro alrededor con una mentalidad abierta, eliminar prejuicios dejando de culpar a quién está solo y perderle miedo al acercamiento" son los primeros cuatro puntos de esta lista de buenas prácticas, que continúa con la importancia de la empatía, dedicar nuestro tiempo a esas personas, "pasar a la acción" o "conectar personas" formando redes que ayuden a que puedan llevar a cabo actividades en grupo y establecer lazos. Además, este decálogo cierra con dos consejos tremendamente esenciales, ya que podemos ser el altavoz en una situación de alarma para que puedan recibir ayuda y también debemos "mantener nuestro compromiso", siempre dentro de nuestras posibilidades y la disponibilidad que tengamos.
Durante la pandemia, se puso de relieve este tema y se llegó a decir que las personas mayores llamaban a los teléfonos de asistencia "para hablar un ratito", lo cual "refleja una realidad que aún hoy sigue siendo crucial" y es que, "en situaciones de emergencia, como lo ocurrido en la Covid-19", la 'Fundación 'Vivofácil' habilitó, nos cuenta su responsable, "líneas telefónicas gratuitas de atención, como el 900 877 037, que permite a las personas mayores y a los colectivos vulnerables encontrar apoyo emocional". "A través de estas llamadas, brindamos no solo conversación, sino también orientación y apoyo psicológico, gracias a un equipo de profesionales y personas voluntarias comprometidas", continúa Aguilera, que nos recuerda que "estas llamadas son anónimas, gratuitas y pueden realizarse en cualquier momento del día" y van de la mano con el "acompañamiento presencial en algunas ciudades, como Madrid".
El impacto mediático y el papel de los jóvenes para acabar con la soledad no deseada
"En 'Fundación Vivofácil' seguimos observando que muchas personas mayores necesitan, más que nunca, un espacio donde puedan ser escuchadas, sentirse acompañadas y saber que no están solas", insiste Mar Aguilera en nuestra entrevista, en la que también le preguntamos por el importante papel que jugamos los medios de comunicación para abordar ese problema, a lo que responde con un valioso consejo: "Es vital que los medios comuniquen que la soledad en la vejez no es un problema individual, sino social. Para combatirla, necesitamos un esfuerzo conjunto, intergeneracional, en el que tanto jóvenes como mayores participen. Un mensaje clave sería fomentar el respeto y la empatía hacia nuestros mayores, quienes tienen un gran valor en nuestra sociedad". Destaca, por otro lado, que "cuando hay casos mediáticos, como el triste fallecimiento de Mayra Gómez Kemp, o incluso cuando figuras públicas como Belén Esteban lanzan mensajes a favor de la teleasistencia, se nota un impacto muy positivo en la conciencia social".
El escenario actual, nos dice, "muestra una evolución, pero sigue siendo preocupante", ya que después de la pandemia han percibido que las personas afectadas siguen recurriendo a sus líneas telefónicas, aunque "la naturaleza de las conversaciones ha cambiado". "Ahora, no solo buscan consuelo frente a la soledad, sino también orientación para reinsertarse en la vida social. Además, temas como la ansiedad y el miedo a la caída en su hogar han tomado relevancia", analiza la directiva sobre lo que ocurre hoy día antes de enviar un importante mensaje a las generaciones venideras: "La implicación de los jóvenes es esencial. Promover el voluntariado y la interacción entre generaciones ayuda a evitar accidentes. También es importante recordar que el simple hecho de estar presente, de dedicar tiempo a escuchar y acompañar, tiene un impacto enorme, como puede ser visitar a un vecino mayor, ofrecerle ayuda para hacer la compra o simplemente charlar".