El último giro en el caso Daniel Sancho: la confesión que desmonta su defensa y explica una de las grandes incógnitas

Sale a la luz, a través de la policía de Tailandia, una de las primeras confesiones de Daniel Sancho que cambia por completo su versión y dificulta el veredicto

JC
José Confuso

Director digital de Lecturas

Daniel Sancho
Antena 3

Quedan pocas semanas para que se conozca el veredicto de uno de los casos más mediáticos de los últimos tiempos. Daniel Sancho cumple ahora un año desde su detención en Tailandia a la espera de que la Corte de Koh Samui dicte sentencia. El hijo de Rodolfo Sancho se enfrenta a una condena que podría llegar hasta la pena capital. Con todo, tanto su defensa como él mismo se muestran optimistas. Así lo explicaba Marcos García Montes, el letrado que ha estado detrás de su estrategia judicial. Pero cuando quedan pocos días para el final, un nuevo informe ha hecho que todo se vuelva a complicar.

Este informe policial saca a la luz una de las confesiones que realizó Daniel Sancho en sus primeros días detenido. El joven, entonces, no dudó en reconocer el asesinato de Edwin Arrieta, algo que posteriormente cambiaría para tan solo declararse culpable de haber desmembrado el cuerpo. Sancho declaró en numerosas ocasiones ante la policía en unas circunstancias difíciles de comprender. Sin traductor y sin la presencia de un letrado, las garantías procesales se desdibujan, como bien ha apuntado la defensa del joven en todo momento.

Pero, ¿qué dijo en aquella ocasión que podría cambiar el planteamiento del caso? Hasta ahora ha quedado claro que el resultado de la sentencia depende tan solo de una circunstancia: la premeditación.

La premeditación en el caso de Daniel Sancho

La diferencia entre la versión que sostiene la Fiscalía y la que mantiene la defensa de Daniel Sancho es, precisamente, la premeditación. Mientras el ministerio público asegura que Daniel Sancho preparó y planeó el muerte de Edwin Arrieta y, por eso, califica el crimen de asesinato y solicita la pena de muerte para él, la defensa asegura que esta premeditación no ocurrió. El fallecimiento de Arrieta, según la defensa de Sancho, fue accidental y las pruebas que encontró la policía son meras casualidades circunstanciales.

De esta puntualización depende que Daniel Sancho sea condenado por asesinato o por homicidio imprudente. Extremo que condicionaría y mucho la pena que se le pueda imponer. Es ahí donde se han centrado los esfuerzos de la Fiscalía para probar la premeditación y de la defensa para desmontar todas las afirmaciones tanto del ministerio público como de la policía de Tailandia. Habrá que esperar al 29 de agosto, fecha en la que se hará público el veredicto, para saber qué opina el tribunal.

Con todo, desde la defensa de Daniel Sancho se presentó como informe final del caso un dictamen de dos criminólogos donde se rebatía cada afirmación de la acusación sobre la premeditación del crimen. Sancho se mantiene optimista en que esto sea tenido en cuenta por la Corte.

La confesión de Daniel Sancho que lo cambia todo

Ha salido ahora a la luz un informe policial en el que se recoge una de las primeras declaraciones de Daniel Sancho. En este, tal y como publican varios medios, Sancho reconocería que plastificó el bungalow donde descuartizó al cirujano. El hijo del actor, según esta versión, habría plastificado suelos y paredes para llevar a caso el asesinato y desmembramiento de Edwin Arrieta. Circunstancia que, claro, probaría la premeditación.

Esta maniobra que, según el informe, confesó el propio Sancho, explicaría también que no se hubiesen encontrado restos de sangre en la habitación donde tuvo lugar el desmembramiento del cuerpo. Y se uniría a las grabaciones y demás pruebas donde se puede ver que Daniel Sancho compró los utensilios y las bolsas donde ocultó los restos mortales tiempo antes del crimen de Edwin Arrieta.

Es aquí donde se aferra la Fiscalía tailandesa para probar la premeditación del hijo del actor. Para la policía que realizó la investigación y para el ministerio público no parece haber duda de la culpabilidad de Daniel Sancho. Así lo han hecho constar en todo momento. Tan claro parecen tenerlo que la Fiscalía ni siquiera presentó el informe final antes de la sentencia. Si bien este no es obligatorio en la legislación tailandesa, suele ser algo habitual. La defensa de Sancho, de hecho, sí presentó el suyo.

La sentencia del caso Daniel Sancho

Será, previsiblemente, el 29 de agosto cuando el tribunal encargado de juzgar la muerte de Edwin Arrieta haga pública su sentencia. También debe tenerse en cuenta que, de no ocurrir, no sería la primera vez que el proceso se dilata. Hasta que llegó la celebración del juicio oral, desde las autoridades tailandesas fueron ampliándose los plazos de forma constante. Con todo, sí parece que cuando se cumple un año de la detención del hijo de Rodolfo Sancho, el caso está a punto de terminar.

El hijo del actor acudía en agosto del pasado año a denunciar la desaparición de Edwin Arrieta en Koh Samui y no volvía a salir en libertad. La policía había recabado ya suficientes indicios que apuntaban hacia una posible culpabilidad y detuvieron a Daniel Sancho. Comenzaba ahí un periplo judicial y personal que nos ha llevado hasta el día de hoy. El hijo de Rodolfo Sancho espera su sentencia en la cárcel y con el apoyo constante de sus padres.

Se desconoce, por el momento, si Rodolfo Sancho o Silvia Bronchalo viajarán a Tailandia este mes para conocer de primera mano la sentencia. No sería extraño que así ocurriese. Tanto el padre como la madre de Daniel Sancho han estado presentes en los momentos clave del proceso de su hijo. También para visitarle y mantener contacto con él. Aun así, desde la defensa de Sancho se asegura que el joven tiene una vida tranquila en prisión.