Muchos señalarán la costa como la mejor zona de España por su clima y la gastronomía que posee, pero, lo cierto es que, no es así. Tampoco lo son las grandes ciudades como Madrid o Barcelona. Según National Geographic, las ciudades y los pueblos más felices se encuentran en el norte de España. De hecho, Bilbao ha sido catalogada como la mejor ciudad del país y destaca por ser un lugar muy tranquilo y lleno de zonas verdes, algo que la mayoría busca en una ciudad para sentirse bien.
La ciudad más feliz de España
A la hora de elegir un destino en el que pasar las vacaciones o para una escapada de fin de semana, son muchas las personas que apuestan por las zonas de costa. De hecho, es un lugar ideal para desconectar donde se puede disfrutar de la brisa de la playa, del mar y se respira toda la tranquilidad del mundo, pero este no es el único lugar. También hay quienes prefieren hacer turismo en las grandes ciudades como puede ser en Barcelona o Madrid, pero de manera puntual. Aunque parezca mentira, existe el lugar ideal donde disfrutar de los pequeños momentos y, en general, del día a día.
Según señala National Geographic, el Institute for Quality of Life asegura que Bilbao es la ciudad más feliz de España y lo califica como "un lugar lleno de vida y tranquilo". Esta ciudad del País Vasco está llena de zonas verdes suponiendo "un impacto directo en la calidad de vida de los residentes", señala National Geographic. Vivir en un entorno más natural es algo que pocos valoran y tiene un gran impacto sobre la salud y el bienestar de las personas. La revista Psychological Science asegura que los jardines y parques influyen positivamente sobre la vida de quienes viven cerca de ellos.
Para determinar que Bilbao es la ciudad más feliz, el Institute for Quality of Life ha analizado a través del estudio 'Happy City Index 2023' distintos aspectos englobados en cinco áreas: gobernanza, economía, población, movilidad y medio ambiente. Entre los resultados obtenidos, destacan la gastronomía, la tranquilidad, el bienestar de los habitantes, la oferta cultural y el transporte público con las puntuaciones más altas. Además, Bilbao no solo destaca como el lugar más feliz de España, sino que, también ha entrado en la categoría de plata de entre 200 ciudades del mundo.
Al parecer, son muchos turistas extranjeros quienes viajan a España para visitar, concretamente, Bilbao porque es una ciudad llena de lugares emblemáticos para recorrer. El Casco Antiguo, la Plaza Nueva, la Catedral de Santiago, el Museo de Bellas Artes o el icónico Museo Guggenheim son algunos de ellos. De hecho, según las estancias hoteleras de la ciudad, 274.156 personas del extranjero visitaron Bilbao en 2023 y el turismo en la ciudad aumentó un 17,1% en el último año. Son los franceses seguidos de los alemanes, estadounidenses y británicos los turistas extranjeros que más visitan la ciudad vizcaína cada año.
Elementos que hacen feliz a un lugar
Como ha señalado el Institute for Quality of Life,la felicidad de una ciudad o pueblo dependerá de la de sus habitantes y en ella influyen diversos factores. Aunque para muchos pase de largo, la situación geopolítica tiene un gran peso en la felicidad de sus habitantes. También influye el número de habitantes y cómo de abarrotado esté el lugar en el que viven. Está demostrado que, en las ciudades más tranquilas, las personas, por lo general, tienen niveles de estrés más bajos. En cambio, los lugares con más habitantes generan una mayor situación de ansiedad y estrés. El tráfico, la falta de aparcamiento, la demanda de viviendas, los altos precios o el transporte público aglomerado son los principales factores que influyen.
Aun así, existen personas de todo tipo y hay incluso quienes prefieren vivir en grandes urbes masificadas, aunque es menos común. De hecho, son muchas las personas que nacen y crecen en ciudades como Madrid o Barcelona y terminan emigrando a otros lugares más pequeños de España. Sin duda, la economía, la educación, la política, la movilidad y el medio ambiente son aspectos muy importantes que todos valoran a la hora de escoger un lugar en el que establecerse, tal vez, de por vida.