Un nuevo incidente relacionado con la batería de un patinete eléctrico casi termina en tragedia. Aunque no se han lamentado víctimas, si existen múltiples daños materiales. Además, el incendio provocado por el patinete ha dejado al edificio entero sin agua.
El incendio se originó en el patio interior del edificio y se propagó con rapidez
Un edificio de Gran Canaria ha tenido que ser intervenido por las autoridades y varios cuerpos de bomberos tras sufrir un incendio. Todo ocurrió cerca de las 20:00 horas del pasado lunes en un edificio localizado entre las calles General Vives y Néstor de la Torre. Según las primeras investigaciones, el origen del incendio se sitúa en el patio interior donde un patinete eléctrico comenzó a arder. El fuego se propagó con rapidez desde el vehículo hasta la lavadora de una vivienda. Poco después, desde el electrodoméstico el fuego pasaba a las tuberías exteriores del edificio. Al parecer, estas se terminaron fundiendo ya que eran de plástico. El incendio provocó una enorme avería que dejó al edificio sin agua.
Además, se inundaron varios espacios comunes como las escaleras de acceso y el propio ascensor. Los vecinos del edificio alertaron a los servicios de emergencia tan rápido como se percataron de lo ocurrido. Hasta el lugar de los hechos no tardaron en desplazarse varios grupos de bomberos, servicios sanitarios de emergencias y agentes de policía. Pese al grave pronóstico del incendio, las propias inundaciones ayudaron a apagar el fuego del interior del edificio. Los vecinos fueron evacuados con rapidez y no se han lamentado víctimas mortales. Sin embargo, si existen importantes daños materiales. Ahora, los vecinos del inmueble tienen una gran tarea por delante. Tras el incendio deben reconstruirse las tuberías afectadas, así como limpiar las zonas comunes inundadas.
Se reabre el debate sobre la peligrosidad de los patinetes eléctricos
El reciente incendio de Gran Canaria ha reabierto el debate sobre el uso y el almacenamiento de patinetes eléctricos dentro de las viviendas, ya que este no es un caso aislado. En los últimos meses, la explosión de las baterías de varios patinetes eléctricos ha acaparado varios titulares. Lo cierto es que algunas ciudades como Barcelona o Madrid ya han prohibido el uso de estos vehículos en el interior del transporte público. Esta medida entró en vigor después de que varios de ellos exploraban en zonas públicas y concurridas como es el metro. Según los cuerpos de bomberos, esta situación se produce durante la carga del dispositivo o cuando están estacionados en lugares cerrados. En definitiva, su uso pone en riesgo la seguridad de muchas personas.